Foto: Jorge González
Para muchos de los habitantes de esta barriada a orillas del rio Isabela, en la capital, la celebración de esta festividad se torna dura y cruel, debido a los altos niveles de pobreza en la que se desenvuelven. Sin embargo, el anuncio de la brisita navidena fue para ellos como un hálito de esperanza, que con el paso de los días se fue desvaneciendo, pues hasta allá no han llegado las prometidas tarjetas.
El Nacional
Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación
