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ORTO-ESCRITURA

ORTO-ESCRITURA

A  la lectora Daisy Vargas  -qué lectora-   le preocupa, como a muchos,  la  frecuencia  con la que numerosos  usuarios de la lengua confunden  estas tres pequeñas palabras: ahí (adverbio), hay (forma del verbo haber), ay (interjección).

La más sufrida es la interjección, porque es  muy empleada en los diálogos escritos a través de facebook,  sobre todo por  jóvenes, entre ellos graduados universitarios. Es muy frecuente sustituir  /ay/  por /hay/  en expresiones como: “Ay, en  qué lío me he  metido”.  O en este caso: “Ay, cariño, si tú supieras”.

El sentido de “Hay cariño” dista mucho de   “Ay, cariño”.  Pero  no  todos los  usuarios del idioma reparan en las diferencias.  Las redes  dejan mucha evidencia del nivel de cada quien,  ahí puede uno darse cuenta de los niveles  de conocimiento de la lengua, por ejemplo,  de líderes políticos, profesores universitarios y hasta de  profesionales de la palabra.

Resulta más fácil escribir /ay/ (dos signos) que /hay) (tres signos). Para quienes tengan dudas en esto, le recordamos tomar en cuenta que  siempre que la expresión  indique dolor, pena, alegría, asombro… se trata de una  exclamación (interjección) y por tanto se  escribe /ay/, generalmente entre signos de admiración.

A esos muchachos y muchachas  que suelen   poner /hay/ cuando deben escribir /ay/  esta columna les recuerda que  han  estudiado el verbo haber, tan manoseado entre hablantes de todas las calidades, pues es un  permanente  auxiliar.

Hay: forma verbal

Hay problema si a la interjección (el gritico) /ay/, se le pone hache.  El vocablo  /hay/ corresponde a la forma impersonal del verbo haber, alterna a su función primaria de verbo auxiliar. Denota  la existencia o presencia de alguien o algo designado por el sustantivo que lo acompaña. Generalmente ese sustantivo va pospuesto al verbo.

Ejemplos: Hay un hombre en el patio. / En la calle Padre Billini hay un hoyo en el que cabe el alcalde./ Siempre hay un pero./  Hay golpes en la vida tan fuertes…/ Hay horas bravas, magistrado. / Hay de todo para su hogar.

Ahí: adverbio

Es un adverbio de lugar. Indica “en ese lugar”. Es palabra  muy familiar.  A veces se emplea como un conectivo para enlazar  una idea con otra, producto de un razonamiento. Ejemplo: De ahí que la  reunión  del CEN está destinada al fracaso. / De ahí se deduce que él está en campaña.

Insistiendo en lo de lugar: Ahí nos vemos, te espero. / Ahí nací yo, a mucha honra. / Nunca he andado por ahí.

Quizá no resulten de buen gusto,  pero  sí son absolutamente correctas estas expresiones en las que intervienen los tres vocablos que comentamos:

1-Ay, quita esa mano de ahí que hay peligro. 

2-A veces una mujer grita “ay” y otras  dice “ahí”, hay problema en el hombre que no lo percibe.

3-¿Qué ves en las redes sociales?  -Ay,  cuántas locuras  hay ahí.

El Nacional

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