La deforestación y la contaminación han representado una estocada casi mortal para los ríos Ozama e Isabela. Las dos fuentes acuíferas agonizan sin que las autoridades, los grupos ecológicos y la ciudadanía intervengan con acciones concretas y efectivas para recuperarlas de las precarias condiciones en que se encuentran.
Son muchos los proyectos que se han anunciado, pero nunca se saben las razones por las que no se ejecutan.
Con motivo del mes de la reforestación, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales se ha propuesto, con el apoyo de varias organizaciones, reforestar las cuencas de los dos ríos.
Más de 8 mil matas de cedro han sido plantadas en aproximadamente 120 tareas en la loma Los 7 Picos, Monte Plata, para mejorar la producción de agua y el caudal del Ozama e Isabela.
El proyecto, más que auspicioso, cuenta con la participación del Fondo Agua Santo Domingo, Fundación Tropigás, Corporación Minera Dominicana, Fundación Popular y la Armada Dominicana. Como parte del programa se sembraron cuatro mil matas de pino en Colinas de Mina, Villa Altagracia, para beneficiar la cuenta del río Haina.
Es importante señalar que esos proyectos son más exitosos cuando se involucra a la población y todos los sectores vinculados a la lucha por el medio ambiente. En su compromiso por preservar y fomentar los recursos naturales el titular de la cartera, Orlando Jorge Mera, debe tomar el detalle en cuenta.

