Prostitución exprés durante el día en las avenidas

Ya no hay que esperar que caiga la noche, tan poco hay que ir a sitios específicos y tradicionales donde muchas mujeres alquilan sus cuerpos por horas para dar placer sexual al mejor postor; con solo pasar por algunas vías importantes del Gran Santo Domingo, se encuentra sexo rápido a un precio que dependerá del tiempo, de lo que se desee y del dinero dispuesto a pagar.

A plena luz del día, entre 9:30 de la mañana a 5:00 de la tarde avenidas como la 30 de Mayo, España, autopista Las Américas, avenida Ecológica, entre otras son ocupadas diariamente por mujeres con la única misión de conseguir el dinero que le garantice el sustento diario de sus familias, de la manera mas viable y segura posible.

Mientras esperan, dos trabajadoras sexuales comparten sueños o experiencias.

Estas mujeres debido a la falta de oportunidades, incentivadas por el bajo nivel educativo, la ausencia de valores morales, el desempleo, la desintegración familiar, el embarazo a temprana edad, y los hombres irresponsables, cada día más están haciendo del trabajo sexual su modus vivendi.

El producto que se ofrece es variado. Gordas, flacas, pequeñas, altas, blancas, negras, jóvenes, menores y hasta algo mayores etc. Y los servicios que ofertan también los son. Las tarifas dependerán del cliente y su requerimiento. De 300 a 700 son los cobros más comunes. El tiempo puede variar, media hora, una hora, dos horas. El lugar también, en un motel, dentro de un vehiculo, debajo de los arbustos (requerido por motoristas) entre otros.

“Yo te diré algunas cosas. Pero sin fotos y sin nombre, y te digo que hoy ni siquiera me he desayunado”. Fue la expresión de Anna (nombre ficticio), el mensaje fue captado inmediatamente. Anna es una mujer morena de unos veinte y tantos años. A pesar del maltrato del tiempo y la mala vida marcada en su piel, conserva una figura semi escultural, que con su cuidado pelo con extensiones le dan un aspecto exótico.

Aunque tiene como base de operaciones la avenida España en donde comparte territorio con otras mujeres, también varía su ubicación, ya que hay clientes que le piden a donde debe moverse. Tiene tres hijos, dos de padres diferentes. Su madre, que vive en un campo de Elías Piña, es otra dependiente de su trabajo.
“A nadie le gusta vivir de ser “cuero”, porque así es que nos llaman, pero muchas

veces no tenemos otra salida. Me dejé de mi primer marido porque me maltrataba. Es un albañil que echa día, y es tan borrachón y jugador que los chelitos no le dan para nada. Le puse una pensión y no resolví nada. Prefiero que no me dé nada a estar jodiendo con eso”, expresó Anna.

No sé, si fue el hambre, el ardiente sol del mediodía o el intenso azul del mar, el detonante para ella desahogarse, pero no paraba de hablar.
“Después me metí con un hombre que es maestro de ebanistería, en principio era más o menos, pero todo empezó a complicarse. Era muy celoso, no era responsable con lo que daba en la casa y siempre cuando se emborrachaba me sacaba en cara que me mantenía a mí y mis hijos”, agregó.

Como este caso que narra Anna hay muchos. Varían en el contenido y muchas situaciones serán diferentes, unas más extremas que otras, pero al final prostituirse es la única salida aparente que ven en lo inmediato.

El sexo oral se ha convertido en uno de los servicios más solicitados en el ambiente del trabajo sexual a la luz del día en avenidas y autopistas, ya que puede darse con facilidad en cualquier lugar, y a la vez no es necesario un traslado lejano y puede hacerse en un período de 15 a 30 minutos.

“Yo prefiero dar sexo oral, siempre y cuando sea con condones, ya que puedo atender a dos o tres hombres en dos horas y ya tengo 600 o 900 pesos ganados. Aunque no crea que eso se ve muy a menudo”, expresó Tati, otro nombre ficticio de una trabajadora sexual.

Las tarifas iniciales para obtener sexo, se discuten como cualquier otra mercancía, pero como habíamos explicado todo dependerá de lo que se quiera y del tiempo que se tarde en concluir el negocio. Algunas al hablar de la cantidad que hacen diariamente exageran los montos. Hablan de 3,500 a 4,000 pesos los días buenos. Y de 2,000 a 3,000 los días malos, sin un análisis profundo se puede inferir que la información es falsa.

Otras informaciones dadas por la mayoría, se pueden dar como ciertas por las cifras involucradas. Dicen ganar entre 500 y 1,500 pesos diarios dependiendo de cómo esté la situación. Cuando se pasa de 1,500 pesos el día fue bueno. Si no se llega a los 700 el día fue malo. Los sábados, domingos y días de cobros (15, 25 y 30) son los más rentables, pero hay días que no se hace nada.

“Estoy en esto desde los trece años, que mi madre murió, y nuestro padre nos abandonó. Lo hice para mantener a mis hermanas, para ayudarlas a que estudien y no tengan la misma vida mía que ha sido muy dura. Usted no sabe lo mal que nos tratan los hombres. Muchas veces no nos pagan y nos quitan lo que tenemos, es por ese temor a los delincuentes que ahora trabajo de día. Las noches no me gustan, ya que se han vuelto muy peligrosas”, agregó Tati.

Trabajar de día tiene muchas ventajas, la luz del sol parece purificar el aire y alejar a los demonios de la noche, como el proxeneta, los delincuentes y los policías extorsionadores. Además, los clientes casados pueden salir de sus casas con el pretexto de trabajar en algún lugar. Pero aún así el día no las libera de las horas de hambre y hombres abusadores, que al parecer son una especie en aumento.

Nuestro país se ha convertido en una fábrica de crear pobres, que deben buscar alternativas para sobrevivir, a pesar del cacareado “crecimiento económico” de parte del Banco Central, que informó que nuestra economía creció 6.1% en el primer trimestre del 2016, y el dato del presidente Danilo Medina de que han salido de la pobreza más de 583 mil personas durante su gestión de gobierno.
En el extranjero

República Dominicana figura como uno de los países que más aporta al mercado de la prostitución sexual en el mundo, según revela un estudio publicado en el 2013 por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y la Asociación Tu Mujer.

El informe revela que se detectó la presencia de prostitutas dominicanas en 66 países en las últimas cinco décadas. Al explicar las causas del problema, la investigación estableció que la pobreza, la violencia de género, la carga familiar y la imposibilidad de alcanzar una vida digna en este país, impulsan a las dominicanas a cruzar las fronteras en busca de mejores condiciones de existencia.
Causas

Aparte de la exposición a los maltratos físicos, a todos tipos de enfermedades venéreas incluyendo el sida, la adicción a las drogas y el alcohol, al rechazo social, y la posible desintegración familiar; los trastornos psicológicos que padecerán estas personas serán de las secuelas más deprimentes, con el agravante de que nunca resolverán su situación económica ni social.

El dato

Según un trabajo de investigación
Realizado en el 2013 por el Centro de Orientación e Investigación Integral, Inc. (COIN), en las calles de la República Dominicana, más de 50 mil mujeres ejercen el trabajo sexual.