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Puntos… y picas

Puntos… y picas

Inoportuna y peligrosa

Los afanes por habilitar a Danilo Medina como candidato presidencial, ya no para 2020 porque la Constitución se lo impide sino para las elecciones de 2024, evidencian la intención continuista y la vocación a la prolongación de la gestión ejecutiva con innegables riesgos de autoritarismo y caudillismo.
Si el “modelo” más favorable a la democracia dominicana en cuanto a limitar los períodos presidenciales consecutivos es dos, como admite el propio Medina y otros políticos relevantes, porqué el afán de disfrazar los intentos continuistas con la propuesta de reforma constitucional de más asuntos.

Este no es el mejor momento para mantener el mismo tema en la opinión publicada forzando la manipulación mediática para “demostrar” la “necesidad” de que el actual mandatario pueda presentarse ante el electorado luego de dos períodos consecutivos y con una pausa de un cuatrienio.

La sociedad no se recupera aún de la crisis política en que derivó la ahora más candente confrontación entre los seguidores de Medina y de Leonel Fernández en el gobernante PLD, que bajó de intensidad luego del discurso presidencial que desactivó la impetuosa intención de reforma constitucional.

Es muy sospechoso que los planteamientos de modificación de la Ley de Leyes para habilitar a Medina como eventual candidato peledeísta en 2024, que no es más que un “regalo envenenado”, hayan salido de políticos de la oposición, como los reformistas, y de Hipólito Mejía, quien se contradice.

La crisis interna del PLD no está resuelta ni tiene visos de “solución” inmediata a no ser en la venidera “primaria abierta” y mal hace la oposición con estos planteamientos que a más de inoportunos son preocupantes y peligrosos para la institucionalidad democrática deseada.