Educación ciudadana
Siempre se ha dicho que las ciudades reflejan la conducta o son la expresión de sus habitantes. Si no existe identidad entre los munícipes y las ciudades, entonces hay que fomentarla a través de programas de educación como el que ha emprendido el alcalde del Distrito Nacional, David Collado.
Santo Domingo es un desastre tanto por la irresponsabilidad de las autoridades al no respetar ni hacer que las normas se respeten como por la indolencia y la falta de educación cívica de sus habitantes.
Como no hay sanción lo menos que hace la gente es lanzar desperdicios en las calles, sin importarles que atenta contra su propia salud y condiciones de vida, o adueñarse de los espacios públicos.
A través del programa “Santo Domingo Soy”, que coordinará la exvicepresidenta Milagros Ortiz Bosch, el alcalde se ha propuesto instruir a la población sobre la gran importancia de mantener limpia la ciudad. Más de 3,600 voluntarios fueron juramentados para la ejecución del proyecto, que estará acompañado de un instructivo sobre las horas adecuadas para sacar los desperdicios de las viviendas y negocios.
La iniciativa es más que auspiciosa, pues crear conciencia es fundamental para el desarrollo y una vida sana. Y ningún camino con ese propósito mejor que el de la educación. La coordinación de Ortiz Bosch garantiza que el proyecto no es politiquero y que se ejecutará con el rigor que amerita, ponderándose todos los factores para al menos avanzar

