La toalla de Lula
Tras agotar todos los recursos habidos y por haber, el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, decidió tirar la toalla en su lucha por candidatearse para las próximas elecciones. Pero al esperar el último momento, consciente de que sus probabilidades eran remotas, ahora está por ver si su estéril batalla no afectará la nominación por el Partido de los Trabajadores de su pupilo Fernando Haddad.
Como exalcalde de Sao Paulo, Haddad podría enfrentar algunos obstáculos al ser acusado por la Policía de recibir sobornos para la adjudicación de obras. Lula da Silva, que corría como favorito en todas las encuestas para ganar las elecciones de octubre próximo, cumple una condena de 12 años de prisión, que al ser ratificada en segundo grado le incapacita para optar por la nominación.
La batalla electoral se perfila ahora entre Haddad, quien corría como candidato vicepresidencial de Lula da Silva, y el ultraconservador Jair Bolsonero.
Por los escándalos de corrupción que han llevado a prisión a prominentes empresarios y líderes políticos el proceso electoral en Brasil se desarrolla en un contexto muy particular, cargado de tensiones y expectativas.

