En el PLD
Marea no baja
Era tan evidente el arreglo para evitar una explosión en la reunión en que el Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) aprobó la celebración de convenciones abiertas y simultáneas que las confrontaciones en la organización continúan al rojo vivo.
La titular de la secretaría de organización y promotora de la reelección del presidente Danilo Medina, la diputada Miriam Cabral, no esperó que la opinión pública hiciera sus conjeturas para anunciar que las decisiones no tenían que ser ratificadas por ningún pleno de dirigentes.
Se habla de que la decisión fue lo poco que pudo conseguir el expresidente Leonel Fernández para evitar que la votación sobre las primarias se viera como una derrota para los suyos. Como prueba concreta de que los conflictos internos no hicieron más que aplazarse, han continuado con el mismo calor tanto las querellas como los aprestos para facilitar la repostulación del presidente Danilo Medina.
En torno a la confrontación, dirigentes como Melanio Paredes han puesto de relieve la magnitud de la crisis a través de acciones y señalamientos. Paredes no solo tildó como “farsa débil” el acuerdo sobre las primarias, sino que fue todavía más lejos al advertir que “solo el IX congreso, con la efectiva participación de la organización, salva de la división al partido de Juan Bosch”.
El hecho mismo de que Medina aplazara para marzo próximo su posición sobre la reelección gravita como espada de Damocles sobre la unidad y los desafíos del peledeísmo.
