Batalla Azua

Primera prueba

La batalla del 19 de marzo de 1844, de la cual se cumple hoy el 175 aniversario, fue la primera gran prueba que hubo de enfrentar el pueblo dominicano tras la proclamación de la independencia apenas tres semanas antes, el 27 de febrero.

Con una numerosa presencia regular e irregular de haitianos, la efeméride, que marcó la determinación de ser libres y soberanos de los dominicanos, adquiere una particular trascendencia. Los dominicanos se sacudieron de los 22 años de ocupación haitiana porque querían vivir con sus propias costumbres, tradiciones y dentro de su propio territorio.

En modo alguno compartirlo. Ese legado es el que tiene que prevalecer en la conmemoración de cada aniversario de la batalla del 19 de marzo, que tuvo en los generales Pedro Santana y Antonio Duvergé sus principales protagonistas.

Es muy significativo que los dominicanos, a pesar de su escaso entrenamiento militar, sin mayores armas de fuego y prácticamente un puñado frente al numeroso y bien armado Ejército haitiano al mando del general Charles Herard, pudieron cantar victoria.

La razón no es otra que la determinación de los compatriotas de ser libres o morir. Esa determinación no debe reducirse hoy solo a la amenaza que puede representar la excesiva presencia haitiana, sino a todo tipo de injerencia extranjera en los asuntos nacionales.

La batalla del 19 de marzo, que tuvo a Azua como epicentro, se libró para ratificar la independencia y la soberanía.