López Obrador

Está claro

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien ha sido duramente criticado por el pacto migratorio para evitar las sanciones con que amenazó su colega Donald Trump, ha vuelto a demostrar que los intereses de su país están en primer lugar al cerrar el paso al flujo migratorio de centroamericanos hacia Estados Unidos.

La nación que en el pasado se distinguió por la independencia de su política y su solidaridad con los países de la región, hoy, bajo un gobierno de orientación de izquierda, ha privilegiado sus intereses patrios en sus relaciones con Washington.

Las naciones centroamericanas están que echan chispas con la decisión de López Obrador de desplegar más de 6,000 soldados en su frontera y contratar a alrededor de 825 nuevos agentes para impedir el trasiego de migrantes.

Pero el mandatario azteca ha preferido la fórmula, que sabe que es odiosa, antes que exponerse a las consecuencias que tendrían para la vida y la economía del país las sanciones económicas con que amenazó Trump.

El acuerdo puede enmarcarse en una estrategia de López Obrador con el propósito de convencer a Washington de construir una amplia zona de libre comercio, como planteó en una ocasión, para reducir el desempleo, además de aumentar la cooperación para fortalecer la seguridad y el orden. Pero lo más significativo es que López Obrador está claro en que México está primero, o, lo que