De tránsito

Otras tragedias

Las autoridades tendrán que prometer menos y hacer más para prevenir tantas tragedias de tránsito. La mayoría de los sucesos que tanta conmoción causan tiene en común, cuando no imprudencias de los conductores, desperfectos mecánicos de los vehículos.

Rebase temerario, exceso de velocidad o malas condiciones del sistema de frenos o los neumáticos se citan siempre entre las principales causas de sucesos que han dejado una larga cadena de víctimas fatales en diferentes vías. El miércoles de la pasada semana, dos accidentes de tránsito ocurridos en Miamón y Santiago dejaron un saldo de ocho muertos y 15 heridos, algunos de gravedad.

El Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), cuya existencia se cuestiona por la ausencia de medidas eficaces para garantizar la mayor seguridad en las vías, tiene que prestar más atención tanto a la circulación como a las condiciones mecánicas de los vehículos. Pero también evaluar a los conductores para determinar si son aptos para conducir unidades de transporte. En Maimón chocaron de frente un minibús y un camión.

Las versiones indican que la colisión se produjo cuando el vehículo pesado hizo un rebase temerario.

En Santiago chocaron de frente dos vehículos, dejando un saldo de tres muertos, una pareja de esposos y una beba de dos meses de nacida. Tanta sangre derramada en accidentes de tránsito suena la alarma sobre la necesidad de medidas más eficaces para garantizar la seguridad en las vías.