La Fundación Progreso, Seguridad Social y Salud advirtió que sería un error y un atentado contra el Seguro Familiar de Salud, cargar a las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) el costo del nuevo catálogo de prestaciones de servicios a los afiliados al sistema.
Recomendó hacer los ajustes correspondientes en el cápita que las prestadoras reciben mensualmente de los aportes de los afiliados y empleadores.
Recordó que las ARS no reciben el valor aportado por cada afiliado, sino que la Tesorería de la Seguridad Social paga a las administradoras una suma fija por cada afiliado, tomada de las recaudaciones mensuales.
Refirió, asimismo, que dado que el Consejo Nacional de la Seguridad Social aumentó las coberturas de ciertos riesgos propios del sistema, como el caso del aumento de la cobertura de medicamentos ambulatorios, ha generado un déficit mensual de 33 pesos por cada afiliado a las ARS.
“En el presente caso, dicha cobertura fue aumentada de tres mil a ocho mil pesos, produciendo un aumento de la cápita de 96 pesos, mientras a la fecha solo ha sido reconocido 63 pesos, generando dicho déficit, e inclusión de 78 nuevos procedimientos para enfermedades de alto costo, costeado en 38.32 y cuestan a las ARS 79.69, produciendo un déficit mensual por cada afiliado de 41.37 pesos”, afirmó.
Citó que la cobertura de atención de salud por accidentes de tránsito fue extendida por el Consejo Nacional de la Seguridad Social, mediante la resolución CNSS 478-01, hasta el 29 de febrero del año 2020. Agregó que la capitación asignada genera un déficit mensual de 3.51 pesos por afiliado.
Atribuyó esa situación a que no se tomó en consideración el incremento de la cobertura de 100 mil por el aumento del 14% del salario mínimo.