Al reanudarse el pulso sobre la suerte de los fondos de pensiones, el sector sindical no solo se opone a la devolución del porcentaje que promueve el diputado Pedro Botello (PRSC-La Romana), sino que estimula las manifestaciones contra la decisión.
No lo hace por defender a las AFP (Administradoras de Fondos de Pensiones), sino porque entiende que la decisión no conviene a los trabajadores, pero tampoco a la economía.
Es el mismo criterio que tiene el sector empresarial, actuales y pasados funcionarios y personas que se identifican más con el liberalismo que con el conservadurismo. Botello, que ha sido coherente y persistente en su reclamo, ha demostrado que, por desesperación, desconocimiento o lo que fuere, también cuenta con un importante apoyo.
Son muchos los que quieren su dinero para usarlo ahora antes que capitalizarlo para una pírrica pensión. De no ser por los incidentes en acciones que ha promovido, como los desórdenes en el Congreso, su imagen fuera mejor valorada.
El legislador tiene también en contra que ninguna figura importante lo ha acompañado en sus reclamos ni en sus acciones.
Sea estimulada por las AFP, el liderazgo sindical u organizaciones civiles, las manifestaciones contra la devolución del 30% efectuadas en Moca, San Pedro de Macorís y Santiago plantean otro escenario en la lucha sobre el destino de los recursos de los trabajadores.