El desarrollo de Dubai fue consecuencia directa de una decisión política de sus dirigentes ante la carencia de recursos naturales que atrajeran inversión extranjera y el desinterés de los propios ricos de ese país de invertir localmente, reveló el sultán , al intervenir ayer en el almuerzo de la Asociación Dominicana de Zonas Francas (Adozona).
Sulayem fue enfático al indicar que el desarrollo de Dubai demuestra que el éxito de todo proyecto depende de sus dueños y que los líderes de un país deben apoyar e incentivar su desarrollo.
Se refirió con orgullo, al que el líder de Dubai el Jeque Mohammed, tuvo la visión de ver las potencialidades de su país más allá de la cotidianidad y apostó al desarrollo de las zonas francas y el turismo, como ejes iniciales, para posteriormente diversificar las ofertas de bienes y servicios.
“Yo salí de mi país a conocer las zonas francas, básicamente las que habían sido exitosas y por qué, pero también para conocer las que no lo habían tenido tan como lo había planteado el Jeque Mohammed”, dijo, al referirse a él como un político que creía en el liderazgo a través del ejemplo.
Al valorar las zonas francas dijo que “ en el año 1983 el gobierno me envió a estudiar las zonas francas en diferentes puntos alrededor del mundo, para determinar qué era lo que se podría hacer en Dubai.Lo que más me interesaba era el aspecto aduanal, que en ese momento era el objeto de mi trabajo”
Afirmó que “me fijé que las zonas francas representaban un concepto mal comprendido: Los gobiernos las visualizaban como un lugar donde las compañías se aprovechaban para evitar el pago de impuestos y aranceles”.
Precisó que de las zonas francas que observó, algunas habían prosperado y otras habían fracasado. “Las que habían prosperado estaban ubicadas en países donde se practicaba el libre comercio, como por ejemplo Hong Kong y Singapur, donde se entendía el concepto y así funcionaba”, pero, aseguró, en muchos países habían fracasado debido a un mal entendido entre lo que permitirían las autoridades aduanales y lo que necesitaban las zonas francas – pero se olvidaban del cliente.
Al rememorar el éxito de Dubai en el transporte marítimo, recordó que “nosotros les preguntamos a las líneas marítimas si incluirían a nuestro puerto de aguas profundas en su itinerario si lo construyéramos, y nos dijeron que nosotros no formábamos parte de sus rutas, y que no traerían a sus barcos de gran calado a Jebel Ali”.
Recordó que “un estudio de factibilidad confirmó el hecho de que la construcción de un puerto de gran calado era una mala idea. Pero el Jeque Mohammed preguntaba ¿cómo se puede vender algo que no tiene?”
Afirmó que contra los consejos de los expertos y sus estudios, decidieron “aumentar la profundidad de uno de nuestros muelles en Jebel Ali. Les informamos a nuestros clientes que lo podían usar, pero a nadie le interesaba”.
Recordó que “dos semanas después hubo una tormenta en el puerto Salalah en Omán, donde un barco grande de la Maersk no pudo atracar. Se dirigieron a nosotros. Luego la MSC Shipping nos llamó diciéndonos que nos enviaría un barco cada dos semanas; dentro de poco tiempo comenzó a llegar uno cada semana”.
Afortudamente, volvieron a llamar a los consultores, “y de repente lo que no había sido un proyecto factible se volvió factible. El resto es historia – Jebel Ali se ha ido ampliando para convertirse en el puerto número nueve en el mundo, con el puerto artificial más grande del mundo”.
“Esto demuestra el valor que tiene el rol de líder”, afirmó.
Agregó que la innovación también es muy importante en los negocios.
“Hoy día contamos con un gobierno electrónico e inteligente – se realizan millones de transacciones en la zona franca, y sería imposible manejarlas todas de manera manual. Nosotros podemos funcionar a un ritmo cada vez más rápido y eficiente”, explicó.
“Nosotros contamos con más de 7,000 compañías en JAFZA, donde trabajan unas 200,000 personas. Mucha gente nos ha dicho que deberíamos especializarnos en la clase de empresa que permitimos operar en la zona franca, o priorizar una lista de ciertas industrias”, agregó.
Pero señaló que si hubieran hecho eso, habrían fracasado. “Nosotros nos abrimos a acoger a la mayoría de los negocios, pero fijamos estándares y criterios de manera que pudiéramos ser selectivos en relación a las empresas que aceptamos”, sostuvo.
Dijo que también contemplaron el servicio al cliente. “Nos encargamos de cada servicio que requiere un negocio para poder funcionar, electricidad, licencias comerciales, permisos de construcción, etc. – y se lo entregamos bajo un solo techo a través de servicios electrónicos en el portal de Dubai Trade”.