ATLANTA – Antes de comenzar la temporada, el mánager de los Azulejos, Charlie Montoyo, insistió en quién usaría como destacado cuarto bateador en su alineación.

No importa Vlad Guerrero Jr., Bo Bichette o cualquiera de los otros sementales en su alineación, Montoyo prometió irse con su mejor bateador de 2020.

Teoscar Hernández estuvo a la altura de esa confianza el miércoles por la noche en Atlanta y algo más, conectando un par de jonrones para llevar a los Azulejos a una victoria 4-1 viniendo de atrás sobre los Bravos.

Combinado con siete entradas de brillantez del abridor de los Jays, Hyun-Jin Ryu, Hernández fue el héroe de la noche, superando la mayor parte de la ofensiva de su equipo.

Comenzó con un batazo en solitario para abrir el séptimo y dar a los Azulejos una ventaja de 2-1, el primero de la noche.

Pero el impresionante fue un batazo gigantesco de dos carreras en el noveno que recorrió un estimado de 464 pies y les dio a los Azulejos una buena dosis de seguridad.

“Al comienzo de la temporada, estaba demasiado ansioso en el plato”, dijo Hernández. “Me estaba volviendo demasiado agresivo y estaba fallando muchos lanzamientos porque estaba tratando de pegarle a la pelota lo más lejos que podía en lugar de simplemente salir y controlar mi cuerpo y mi swing. Sé que si le hago un buen swing a la pelota, llegará muy lejos».

Hernández, quien fue elegido MVP de los Azulejos en 2020 y ganó un premio Bate de Plata, apenas se ha perdido un latido a pesar de faltar a 16 juegos mientras estaba en la lista de lesiones relacionadas con COVID-19. Desde que regresó el 30 de abril, ha impulsado 15 carreras en 12 juegos, la mayor cantidad en las Ligas Mayores en ese lapso.
En cuanto a lo de cuarto bate, Hernández agradeció el asentimiento de su patrón, pero ha tratado de no leer demasiado.

«Voy a decirte lo mismo que le digo a él, no importa dónde me pongas», dijo Hernández cuando se le preguntó qué significaba cuando Montoyo lo designó como limpiador. «Voy a estar ahí para ti y el equipo y hacer lo mejor que pueda y hacer daño para ayudar a mi equipo».

El daño viene con cierta regularidad en el plato ahora, al igual que lo hizo en su revolucionaria campaña 2020, y Hernández reconoció que hay algo de valor entre Guerrero Jr. y Randal Grichuk.

«Te da más y más confianza porque sabes que el lanzador te perseguirá y lanzará más strikes porque Vladdy está frente a mí y Grichuk detrás de mí», dijo Hernández, quien tuvo el décimo juego de jonrones múltiples de su carrera. .

Con la victoria, los Azulejos mejoraron a tres juegos sobre .500 (19-16) por primera vez esta temporada y en su quinto intento de hacerlo. Ahora han ganado cinco contra su contraparte de la Liga Nacional y pueden completar una serie y una barrida de temporada en una matiné del jueves en Truist Park.

UN APUNTE

En la zona

Batear en el medio de la alineación de Toronto detrás de Vladimir Guerrero Jr. y delante de Randal Grichuk le permite a Hernández ver mejores y más predecibles lanzamientos en la zona de strike.