No todas las incógnitas quedaron despejadas en la apertura del X Congreso del PLD, pero por lo menos quedó claro el espíritu de lucha de los principales dirigentes de ese partido.
Su presidente Danilo Medina no solo asumió su cuota de responsabilidad en la debacle electoral de la organización, sino que se mostró confiado en que sobre la base del trabajo el PLD puede volver a ser lo que era.
La reconstrucción del partido a que animó el también expresidente de la República a sus militantes es la gran tarea después de bajar a un tercer lugar en las pasadas elecciones con un 10.3 % y quedar sin representación senatorial.
Lee también: Buen ejemplo: Congreso PLD
Medina advirtió a los peledeístas que solo a través del trabajo el PLD puede vencer los pronósticos de convertirse en una organización minoritaria, al estilo el PRD y el PRSC. Medina no escurrió el bulto, pero tampoco se amilanó frente al horizonte político.
“Comprendemos que las decisiones que nos han llevado a esta situación son, en primer lugar, responsabilidad de la dirigencia que las ha tomado”, expresó Medina.
Pero generó dudas al señalar que la renovación de la estructura dirigencial debe ser un proceso inclusivo “en el que no se mire a las personas por su edad, ni por su condición social, ni por su género”.