La Defensora del Pueblo, Zoila Martínez Guante, envió una comisión de abogados investigadores para indagar las condiciones en que se encuentran los reclusos de la cárcel preventiva de Higüey, en donde en menos de dos semanas han muerto dos reclusos, uno de ellos por desnutrición grado tres y deshidratación severa.
La comisión integrada por María Batista, Segunda Adjunta y Carlos Deschamps, Abogado Inspector, pudo constatar las condiciones infrahumanas en las que viven más de 300 reclusos, en una infraestructura con capacidad para cincuenta reos.
Informaron que uno de los motivos principales de la sobrepoblación en el centro se debe a la falta de personal, ya que hay más de cien reclusos que no han podido ser trasladado a otros recintos por la falta de una resolución policial.
Según los internos, las condiciones de calor, la falta de agua potable, el hambre y las enfermedades que proliferan en el lugar como tuberculosis, cólera, salpullido, entre otras, son detonantes para que ocurran casos como los de Wuandi Zue y Aleudy Simá, fallecidos recientemente.

