Los gobernadores de bancos centrales, ministros de finanzas y superintendentes de bancos de Centroamérica, Panamá y de República Dominicana así como funcionarios del FMI que se reunieron en Punta Cana coincidieron en que la economía global se encuentra ahora en una desaceleración sincronizada.
Reconocieron también las revisiones a la baja del crecimiento global para 2019 a 3 por ciento, su ritmo más lento desde la crisis financiera mundial.
Estimaron que las incertidumbres, generadas por las tensiones comerciales y geopolíticas, incluidos los riesgos relacionados con el Brexit, están frenando el crecimiento.
Los participantes expresaron su preocupación ante el impacto significativo que podrían tener las tensiones comerciales en el nivel de crecimiento global.
Se proyecta una mejora modesta en el crecimiento global a 3.4 por ciento en 2020. Sin embargo, esta recuperación no es de base amplia y sigue siendo precaria, ya que el crecimiento también se ve afectado por factores específicos de cada país en varias economías de mercados emergentes y por fuerzas estructurales, como el bajo crecimiento de la productividad y el envejecimiento en las economías avanzadas.
“Reflejando las condiciones mundiales, las perspectivas para América Central, Panamá y la República Dominicana (CAPDR) están marcadas por una mayor incertidumbre”, indicó la declaración.
El crecimiento regional se revisó a la baja a 3.3 por ciento en 2019 (de 3.8 por ciento a principios de este año), ya que el impulso al crecimiento se desaceleró en el primer semestre de 2019, reflejando la recesión económica global sincronizada y varios factores idiosincrásicos.
Los participantes coincidieron en que los principales riesgos externos a las perspectivas de CAPDR son un endurecimiento de las condiciones financieras globales y una mayor escalada en las tensiones comerciales mundiales.
Además, dado que la región está altamente integrada con los Estados Unidos de América debido a los flujos comerciales y financieros, CAPDR sigue siendo vulnerable a los acontecimientos económicos y políticos de EU.
En términos de respuesta de política, los participantes coincidieron en la importancia del fortalecimiento institucional y una clara comunicación para legitimar las reformas planeadas.