Todo sobre el tamaño del universo: el límite del Universo visible desde la Tierra está a 46.500 millones de años luz, en todas las direcciones. Es decir, un diámetro de 93.000 millones de años luz, recordando que un solo año luz son casi 10 billones de kilómetro, donde un billón es un millón de millones. ¡Puff! Estamos hablando de distancias inconcebibles para nuestra cabeza. Aunque el cálculo es enorme, y aun así, es sólo la parte del Universo que podemos ver. Tras el Big Bang, el Universo se expandió tan rápidamente que parte de su luz aún no ha llegado hasta nosotros y, por eso, no podemos verlo completo.
Algunos astrónomos sugieren un tamaño de sólo 24 gigaparsecs, o 78.000 millones de años luz, mientras que otros le dan una extensión de 200 mil billones de años luz, confiriéndole una naturaleza plegable, incomprensible para nuestro cerebro, de modo que al tratase de billones, desde nuestro punto de vista el universo resultaría infinito. Ahora bien, el universo observable (o visible), que consiste en toda la materia y energía que podía habernos afectado desde el Big Bang dada la limitación de la velocidad de la luz, es ciertamente finito, pero igualmente engañoso, ya que continuará expandiendo sus límites en la medida que telescopios más potentes puedan ver más allá.
Si aceptamos los 46.500 millones de años luz en todas las direcciones desde la Tierra, el universo visible se puede considerar como una esfera perfecta con la Tierra en el centro. De modo que en cada mundo que se haga la medición, el planeta que la realiza funge como centro.Un año luz es una unidad de longitud utilizada en astronomía para medir la distancia que recorre la luz en un año.
Hay que remarcar que un año luz no es una unidad de tiempo ni de velocidad, sino de longitud. Es una unidad muy popular que la mayoría de la gente domina, pero los científicos prefieren usar el término Pársec, una unidad que equivale a 3,26 años luz. Para que nos hagamos una idea, la estrella más cercana a la Tierra (obviando el Sol) está situada a aproximadamente 4,22 años luz, de modo que multiplique esta cifra por 10 billones y sabrá a qué distancia está el vecino más próximo a nuestro astro rey. ¿Qué le parece?
