El Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional ordenó hoy la separación del proceso del caso Medusa, de la imputada Altagracia Guillén Calzada, quien continúa aquejada de salud.
El juez Amauri Martínez acogió el pedimento de desglose hecho por el procurador adjunto y titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa(Pepca), Wilson Camacho, el cual busca que la emputada sea juzgada de forma separada para no entorpecer el proceso, que está en la parte final de la etapa preliminar.
La defensa de la acusada pidió que a su cliente se le conozca el proceso de forma virtual, ya que la misma está tomando medicamentos que le producen somnolencia, pedimento que fue rechazado.
La defensa de la encantada, integrada por los abogados Valentín Medrano y Luis Fernández presentaron un recuerdo de oposición, ya que entiende que de mantenerse la decisión sería nula, por violarla la ley.
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La separación del proceso implica que el juicio a la imputada del caso Medusa reiniciaría desde ceso.
El Ministerio Público acusa a 41 personas físicas y 22 empresas de coalición de funcionarios, prevaricación, asociación de malhechores y estafa contra el Estado. También, por sobornos, crímenes y delitos de alta tecnología y lavado de activos.
En el proceso judicial denominado Medusa, el órgano persecutor acusa al exprocurador general de la República, Jean Alain Rodríguez Sánchez; Alfredo Alexander Solano, exsubdirector administrativo del Ministerio Público; a Javier Alejandro Forteza Ibarra, exdirector de Tecnología de la Información y la Comunicación del Ministerio Público, y a Jonathan Joel Rodríguez Imbert, ex director administrativo.
Asimismo, a Jenny Marte Peña, exencargada de Proyectos; a la ex subdirectora administrativa, Altagracia Guillén Calzado, así como a Rafael Antonio Mercedes Marte, exdirector de Contabilidad, y al exasesor Miguel José Moya.
