Seis meses atrás nadie dudaba que el candidato por excelencia para los comicios de mayo del 2016 lo sería el expresidente Leonel Fernández. Esto ante el impedimento constitucional que pesa sobre el mandatario Danilo Medina. El político mejor valorado en la actual coyuntura.
Sin embargo, tanto a lo interno del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), su aliado tradicional el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), y quien debiera dirigir la oposición, el Revolucionario Dominicano (PRD), comienzan a surgir aspirantes a la codiciada candidatura.
Con los dimes y diretes de los perredeístas es casi imposible que puedan armar una candidatura unitaria para las elecciones del 2016 y convencer a los electores que el desorden interno no sería llevado al Estado.
Los reformistas, tradicionales aliados de los peledeístas, han perdido parte de su identidad, amén de los conflictos internos entre seguidores de Amable Aristy Castro y el canciller Carlos Morales Troncoso, con lo que ninguno de los dos garantiza la unidad que le permita hacer un papel decoroso en esos comicios.
El PRSC está obligado a una candidatura intermedia, por lo que una fuente asegura que los aprestos en ese sentido están encaminados y que al menos uno de los dos jefes de grupo está convencido de la viabilidad de una postulación del ingeniero FedericoQuique- Antún Batlle, afin de rescatar de la inercia al reformismo.
Mientras en el PLD, el declive del encanto del expresidente Leonel Fernández y sus problemas con la justicia moral y legal, abre las puertas a otros dirigentes del partido morado.
De ahí que Francisco Javier García haya tomado la delantera al revelar la intención de lanzarse al ruedo en busca de la candidatura presidencial por el partido morado. Temístocles Montás y Gedeón Santos, son otros que andan tras lo mismo.
Aunque con éste último el asunto no está claro, ya que más que de un aspirante, sus aprestos parecen más de un reeleccionista, por el ahínco con el que defiende la gestión de Danilo Medina.
