Aunque recién se ha puesto de moda, ha existido siempre. El acoso escolar, bien conocido por su término en inglés, bullying (intimidación) es cualquier forma de maltrato continuado y deliberado por uno o más chicos contra otro, sin motivación evidente. Se le llama escolar porque se da generalmente en ambiente de escuela.
El famoso caso del adolescente australiano CaseyHeynes, víctima de acoso por parte de un niño de 12 años, hizo resonar un tema latente. Un vídeo de youtube, con más de un millón de visitas, muestra como Casey, cansado del maltrato, decide actuar en contra de su agresor.
A pesar de la acogida que ha tenido ésta historia, y las campañas en contra de éste tipo de hostigamiento que se han generado, el acoso escolar sigue siendo preocupación en muchos centros escolares . y en muchas familias.
En ocasiones no es tarea fácil saber cómo enfrentar éste tipo de abusos; y es que antes de buscar maneras de hacer frente a estas situaciones, debería saberse bien qué cosas implica un acoso escolar. Tenemos:
Maltrato verbal y/o físico
Exclusión social, en donde se margina a la víctima en actividades comunes de juegos, grupos de estudios, etc..
Intimidación, esto es, amenazas continuas que mantienen a la víctima en estado de temor, que llevan a algunos niños incluso a negarse a asistir a la escuela.
Si alguna de éstas situaciones se están dando de manera continuada en contra de un niño específico, probablemente está sufriendo de un acoso escolar. De ser el caso, es responsabilidad de la escuela estar alerta ante la posibleaparición de éste tipo de situaciones.
En cuanto a los padres, la comunicación es vital. Hablar con su hijo respecto a su vida social en la escuela puede significar toda la diferencia entre un niño maltratado y uno que no lo es. Esto puede tomar tiempo, ya que habrá que animar al niño a hablar, mas nunca obligarlo.
Realizar actividades con los padres que le generen confianza al hijo y sobre todo, ser buenos escuchadores. Es importante no juzgar demasiado rápido ni tampoco restar importancia a lo que tenga que decir el niño.
Si se percibe que el hijo está siendo víctima de acoso, nunca comunicar al colegio sin el consentimiento del niño; y al hacerlo, intentar buscar a la persona idónea (profesor, tutor, orientador o psicólogo).
Incluso si no detecta ningún tipo de comportamiento que haga de su hijo una posible víctima del acoso escolar, siempre es conveniente hacer consciencia en élde lo que significa y lo importante que es detener éstas situaciones a tiempo, o nunca participar de las mismas, según sea el caso.
