Opinión

Precisamente

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Democracia corre peligro

 

Queremos un país mejor y más justo. La sociedad necesita poner en el centro a la persona humana. Las políticas públicas responsables, concertaciones con los sectores empresariales, el voluntariado, sociedad civil y otros.  Según nuestra convicción precisan avanzar hacia procesos de integración estratégica, el equilibrio sustentable y el respeto a los derechos humanos para una mejor convivencia.

Pero, si se resquebrajan las reglas de la sociedad, la democracia corre peligro. Esto impide conquistar un sistema de vida con libertad y autonomía, factores que fortalecen los derechos y la dignidad a que aspira el género humano.

Puedo afirmar que el gobierno actual ha puesto interés en una vinculación estrecha con las prioridades de la población, lo que genera expresiones de satisfacción y expectativa.  Todo esto, a pesar del descontento profundo por una reforma fiscal que cambia las cosas.
Ya no es una elección, sino una obligación lo que se nos impone, y, al mismo tiempo, descompone la vida en sentido general. Lo peor es, que luego la sustituirá ‘’otra’’ y ‘’otra’’… Para colmo, al pasar unos cuantos años, otro cambio de gobierno con una nueva racionalización administrativa. De esta forma, estas cuestiones, cada vez son más complejas.

Pienso que, en el fondo del cuadro que intento describir, siempre se trata de crear, entre otras travesuras, fuentes de ingreso para beneficiar en algunas ocasiones propósitos políticos.  Así, aunque parezca paradójico, es una realidad explicable…
La desigualdad es ilegitima. Y, la gente tiene legítimo derecho a sentirse resentida, con el hecho de que se cierran las oportunidades deseadas. Es inevitable iniciar un camino de reconstrucción en la estructura institucional de este país.
Entonces, ¿qué hacer?

El Nacional

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