Sorpresa
No ha dejado de sorprender la disensión de la Asociación de Industrias de República Dominicana con la firma del postergado pacto fiscal y de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Extraña porque ambas iniciativas serían no solo con el objetivo de aumentar los ingresos, sino para disciplinar el gasto público, una de las demandas que tanto ha formulado al Gobierno el sector empresarial.

El presidente de la AIRD, Campos de Moya, reconoció, sin embargo, que normalmente cuando el FMI firma un acuerdo con un país es porque tiene problemas financieros y se requiere que se establezca una disciplina en el manejo de los recursos.

Pero si ha sorprendido la oposición al acuerdo con el FMI, más todavía ha extrañado el rechazo del presidente de la AIRD al pacto fiscal, una iniciativa contemplada en la Estrategia Nacional de Desarrollo consignada en la Constitución.