Con el anuncio de Reimbou llega a los cines, desde el jueves 16 de marzo, una película “parte-aguas! Con este drama familiar, el ambiente cinematográfico se llena de magia, encanto, evidencia de desarrollar nuevos niveles del cine, orgullo por saber que se traza el camino necesario y esperado y comporta una ventaja no expresa: la certidumbre de que se puede hacer un buen cine local con pasaporte para el mundo.
Cacique Films, la productora fundada por Gilberto Morillo, Naslha Bogaert y David Maler, convocó anoche a los medios y allegados (patrocinadores, vinculados y sus talentos) al anuncio de que esta película llega a los cines. Hasta ahí la ruta de mercadeo es similar a lo que siempre se hace.
Naslha y Maller fueron detallando cómo se concibió el proyecto, a partir de una novela homónima de Pedro Cabiya, escritor, poeta y guionista boricua y cuyo texto aporta el concepto diferenciador fundamental, paso imprescincible para tener una película de alto nivelo.
Naslha refirió que se optó por hacer un casting nacional, al que se presentaron unas 500 personas, de donde salieron los taltentos que finalmente van a pantalla.
La cinta se rodó, tras una labor de pre-producción que incluyo la definición de una co-dirección, integrada por Maller y el español Andrés Curbelo. Para ambos era la primera vez que dirigían un filme.
Los cuadros fundamentales de lo técnico: Director de Fotografía: Marc Miró; Edición: Nino Martínez Sosa; Diseñador de Producción: Rafi Mercado; Música: Nicolás Sorín; y Diseño de sonido: Alejandro Castillo, por citar sólo una parte.
La película se desarrolla en una comunidad rural marginada: El Cabrero, del municipio de Guerra, y en dos tiempos: 1965 (con la guerra de Abril como trasfondo) y 1973, con ambientes urbanos de clase media.
Da la impresión de que el empeño para la dirección de arte (Raffi Mercado, vestuario y maquillaje), demandaron un esfuerzo fuera de los límites rutinarios.
En El Cabreto, en la que ordinariamente nunca llueve en la época seleccionada para el rodaje, llovió casi todos los días.
Un milagro infantil
El actor central de Reinbou es un niño de siete años, Erick Vásquez (Angel Maceta), un hijo en busca del padre que nunca conoció, en tiempos de la guerra civil dominicana de 1965.
Es la ópera prima de los directores David Maler y Andrés Curbelo. Erick se erige desde ya, por lo que se vio anoche, como el mejor actor infantil dominicano. Naslha Bogaert acomete un personaje de madre soltera, de un sector empobrecido dejando de lado el atractivo físico.
Ahora resulta una madre marcada por la humildad y la crueldad de un medio social agresivo. Aparente ser el papel dramático de mayor exigencia que ha acometido.
David Maler tiene dos personajes, bastante diferenciados y que también le reclamaron mucho. Héctor Aníbal es un personal crucial (el del padre desaparecido).
Reinbou abre puertas del cine local a las pantallas del mundo.
