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Apolinar de la Cruz Sosa

Apolinar de la Cruz Sosa

Alberto José Taveras

El fútbol dominicano pierde a destiempo el mejor portero en la historia de esta disciplina, miembro del Salón de la Fama de Deportistas Petromacorisanos y gloria del deporte nacional, Apolinar de la Cruz Sosa. No sólo fue un destacado atleta sino también un excelente arquitecto, profesional a carta cabal en el mundo de los Bienes Raíces, armador de negociaciones para desarrolladores inmobiliarios y sobre todo un padre entregado, amigo sincero y noble.

Apolinar fue un amante de los deportes desde temprana edad con una destacada participación por cuyos logros y méritos fue exaltado como inmortal del deporte en el Salón de la Fama de Deportistas Petromacorisanos en el año 2015. Desde los ocho años se inició en los deportes en el Club Villa Velázquez, destacándose en baloncesto y luego practicando lo que fuese su pasión el fútbol desde los 9 años en la cancha de la Escuela Normal.

Fue introducido a esta disciplina por su primo, el ex jugador y ex árbitro internacional FIFA, Manuel Sosa, por los españoles Ángel Tarrazo y los hermanos Rubén y Florindo González, quienes le dieron las primeras lecciones en este deporte.

En 1978 recibió sus primeros entrenamientos de la mano del decano del fútbol dominicano, el argentino-dominicano Jorge Rolando Bauger, a raíz de su convocatoria a la selección nacional juvenil de ese mismo año. Bauger fue su preparador como portero, posición que jugó por doce años en la selección nacional hasta su retiro del equipo en 1992. Logró importantes conquistas durante su fecunda carrera entre ellas un título en el Campeonato Nacional de Segunda División en 1976 y 1978 con el equipo de la Universidad Central del Este, miembro del seleccionado juvenil que asistió al Centroamericano y del Caribe de 1978 en Tegucigalpa, Honduras; títulos con la UASD en los campeonatos de Primera División de 1980 y 1981, entre otros eventos nacionales e internacionales. Fue el arquero menos goleado en los campeonatos de 1982 a 1985, Jugador Más Valioso y miembro del equipo campeón del Club Dominguito en 1991, integrante del primer equipo que logró derrotar a un seleccionado profesional haitiano en 1987, en 1991 ayudó al equipo tricolor a clasificar a la segunda ronda del Campeonato de Nacionales del Caribe efectuado en Jamaica, primer jugador dominicano solicitado para jugar de un club italiano (Torre Anela en 1992), elevado a la categoría de Gloria del Deporte en 1997.

Fue entrenador del seleccionado de San Pedro en los Juegos Nacionales de Moca 85 y Santiago 87. Como apasionado del fútbol estuvo presente como espectador en la Copa del mundo en Estados Unidos 1994, en la de Francia 1998, Brasil 2014 y en la de Rusia 2018. Descansa en paz; “Inmortal del fútbol dominicano Apolinar de la Cruz Sosa”.