san pedro de macoris. Juana Arrendell estará nuevamente en la cima del deporte dominicano y lo hará en su natal provincia de San Pedro de Macorís.
La espigada atleta que una vez dominó a su manera la prueba de salto de altura en América y que fue una competidora de respeto a nivel mundial, será elevada al altar de la gloria como deportistas de su ciudad.
Sobre todo, después que ha sido escogida para ser exaltada al Salón de la Fama de Deportistas Petromacorisanos, institución que reconocerá la trayectoria de la saltadora, como lo hiciera hace poco el Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
Juana es la segunda deportista anunciada para abrazar la inmortalidad en San Pedro de Macorís, dentro de la gala de exaltación de este año que será celebrada el domingo 10 de septiembre en el Salón Don Francisco Comarazamy de la Alcaldía de esta ciudad.
Su elección fue anunciada ayer por el Presidente del Salón de la Fama de Deportistas Petromacorisanos, Juan Eric Yermenos, quien aseguró que la hoja de servicio de Arrendell y sus aportes al país no ameritan mucha presentación.
Arrendell fue la mejor atleta del continente de su generación en la prueba de salto de altura, prueba que dominó por casi diez años y en la que se convirtió en la campeona de Juegos Panamericanos.
Nacida el 26 de septiembre de 1978, Juana comenzó su camino al estrellato y a la inmortalidad en la entonces Academia Nacional de Atletismo, que para la época (1993) dirigía el entrenador cubano Bernardo Clark, después de haber sido descubierta y desarrollada en San Pedro por el entrenador Luciano Alvarez.
Arrendell abandonó las pistas después de una gloriosa carrera que le hizo ganadora de tres medallas de oro en Juegos Centroamericanos y del Caribe y de una presea dorada en Juegos Panamericanos, los de Santo Domingo 2003.