Sindicalistas, economistas y empresarios han arreciado su embestida contra el diputado Pedro Botello por su obstinada lucha para que se devuelva a los trabajadores el 30% de los fondos de pensiones.

De lo nefasto que resulta para la economía despojar al sistema de alrededor de 300 mil millones de pesos se ha pasado a cuestionar la capacidad financiera del legislador para organizar marchas en diferentes localidades del país.

Botello, sin embargo, no se inmuta ante cuestionamientos sobre una lucha en que ha incurrido en violación del protocolo contra el coronavirus, además de protagonizar incidentes en el Congreso.

Con el deseo que tiene la gente de dinero al legislador se atribuye encender fuegos artificiales con un proyecto de devolución de recursos que en momentos como los actuales se convertirán en sal y agua con la inflación que golpea a los consumidores.

Al no entrar en razones técnicas y económicas el diputado tendrá que prepararse para enfrentar una embestida con armas de más grueso calibre empleadas por sindicalistas, economistas y empresarios que desaprueban la devolución de los recursos por el impacto que tendría para la economía.