¿Qué Pasa? Entre cielo y tierra

Burdel de la poesía

Burdel de la poesía

Mary Leisy Hernandez

Poetas vestidos de manera erótica, estrambótica, romántica o fantasiosa, mercadeaban sus poemas al primer o al último postor, en un espacio denominado el Burdel de la poesía, en un movido barrio de París. En cualquier rincón, con luz tenue, los poemas de amor eran susurrados a los oídos de los clientes que previamente fueron seducidos con algún verso.

La actividad muestra de manera teatral, que la poesía cabe en todas partes, que el arte tiene muchas posibilidades, se puede mezclar con cualquier vertiente artística. La creatividad en la poesía no solo está en la inspiración a la hora de escribir, también en la manera de presentarse, de llegar a la gente.

En este caso, simular un prostíbulo donde se seduce con la poesía, fue la manera de enamorar al público en un bar parisino muy bien adaptado para la ocasión.

La poesía fue dramatizada, a veces cantada y hasta bailada, en un performance de la escritora Paloma Hermina. Ella, como los otros participantes, es autora de varios libros y como los demás artistas de la palabra, estuvo con sus poemas disponible bajo el brazo, para declamarlos en intimidad a quien quisiera escucharlos. Durante la noche me sedujeron varios escritores y me dejé conducir por ellas y ellos a sus “alcobas”, tan solo para escuchar sus inspiraciones.

La actividad fue el fin de un taller literario con dos jornadas de trabajo creativo. Este “Bordel de la poésie” abre sus puertas con cierta regularidad y periodicidad tanto en París como en otras ciudades. Para mi, es una referencia de lo que se puede hacer con el arte para hacerlo aún más accesible y dinámico, para que llegue y motive a más público.