Contra corruptos
Señor director:
Quien vota por los corruptos los legitima, los justifica y es tan responsable como ellos. La ignorancia no debe ser excusa exclusiva para dejar de nuevo el compromiso de salvar la patria y acudir a su rescate, sin vender el derecho póstumo y privilegiado de ejercer el voto. La ignorancia no discierne, busca un tribuno (un picapollo, RD$ 500 y pote de romo) y toma un tirano. La miseria no delibera y se vende. Alejar el sufragio de manos de la ignorancia y de la indigencia es asegurar la pureza y acierto de su ejercicio.
Yo quiero que seas tu quien le quite al país el hambre de florecer en democracia y marcar un rumbo político distinto, donde los ideales de Juan Pablo Duarte sean los que dejen de ser parte de una utopía efímera e intangible. Esta responsabilidad está en tus hombros, recuerda cuando estés de frente a la boleta y nadie te pueda ver a quién eliges; si te mantienes esclavizado por el compromiso de la miseria, o te sumas a la llama de un pueblo sublevado, dolido y listo para salir de los políticos corruptos hacia el país que todos merecemos.
Ahora es el tiempo de que conspiremos unidos y decididos al asesinato político más abrumador de la historia dominicana. Las elecciones presidenciales serán la venganza del ciudadano dominicano. La boleta electoral es un puñal de papel y así daremos la mejor muerte electoral a los corruptos e indignos de llevar la bandera tricolor en su pecho.
Votar por proteger intereses personales y partidistas.
Eres el cáncer que mata a la sociedad dominicana. Eres la razón de que el país este plagado de los feminicidios que dejan hijos huérfanos y familias marcadas con dolor para toda la vida. Eres el prepotente jefe que entendiste que mereces respeto por robarle al pueblo, que abusas de tu poder, violas los derechos democráticos y constitucionales de todos los dominicanos.
A ti que entiendes que la nación sigue en la misma ignorancia de seguir votando por ti y tus compañeros de partido, te equivocas. Hoy el repudio de nuestra nación sigue creciendo, cuando llegas a lugares públicos donde los abucheos y repudio son el desahogo de un país secuestrado por tantos años de maltrato y olvido a nuestros derechos.
A ti que pasas en las redes sociales y periódicos digitales dejando comentarios sin argumentos que den validez al estado deplorable del país, porque tu coeficiente intelectual no pasa de insultos barriales dejando conocer tu halitosis crónica.
Elvin Dominici