El embajador de Venezuela en el país, Ali Uzcátegui Duque, encabezó un acto conmemorativo del levantamiento militar encabezado por el fenecido expresidente de esa nación, Hugo Chávez, en cuya actividad participaron grupos de izquierda dominicanos y personal acreditado de las naciones que respaldan al gobierno constitucional que encabeza Nicolás Maduro.

Duque resaltó los acontecimientos del 4 de febrero de 1992, al afirmar que los que participaron en éstos buscaban defender la soberanía venezolana.

“Hace 27 años, aquel 4 de febrero de 1992, un grupo de valientes soldados revolucionarios liderados por el comandante Hugo Chávez Frías, alzó su voz para detener la entrega de la soberanía e integración nacional, de manos de gobiernos alineados con Estados Unidos.

Este hecho, marcó un punto de inflexión en la historia contemporánea de Venezuela”, dijo el diplomático.
Venezuela está sumida en una profunda crisis política, agravada tras la autoproclamación como presidente, del líder opositor, Juan Guaidó, quien cuenta con el apoyo de Estados Unidos, la Unión Europea y varias naciones del continente americano.

Los gobiernos de Rusia, China y Turquía expresaron su “apoyo firme” al gobierno de Maduro, al considerar que es el presidente constitucional de la nación sudamericana.

El mismo apoyo lo expresaron los gobiernos de México, Cuba y Bolivia.
Algunas organizaciones internacionales han expresado su preocupación ante una posible intervención militar en esa nación, por parte de Estados Unidos.

El Gobierno de Maduro advirtió que está preparado para “defender con las armas” la soberanía de Venezuela, un país afectado por las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump.

UN APUNTE

Un Apunte

El 4 de febrero, Día de la Dignidad Nacional se conmemora como homenaje a la rebelión cívico militar de 1992, liderada por Hugo Chávez, gesta que el embajador Uzcátegui dice es considerada por el pueblo venezolano “como génesis de la Revolución Bolivariana, hoy amenazada por fuerzas externas”.