Gracias y trascendencias
No sabía que una de nuestras instituciones nacionales de arte, el Ballet Folkórico Nacional, se había tomado el tiempo para prestar atención a nuestra labor como cronista y crítico de artes escénicas y espectáculos, al punto de entregarnos el Premio como tal ,una estatuilla original de la cuales se confeccionaron 15, una para cada área premiada y que me permito agradecer por su significación y valor en este instante de una carrera periodística que debía estarse despidiendo de estos afanes, emocionantes pero exigentes, del quehacer diario en El Nacional y su suplemento diario de variedades Qué Pasa!
El Ballet Folklórico Nacional, con motivo de sus 40 años de existencia, levantando el perfil nacional desde la danza autóctona, convocó a una semana de celebraciones que concluye hoy, para celebrar tanto afán, tantas jornadas de ensayo, tantas presentaciones, tanta impronta coreográfica basada en los ritmos originales, tratando de darles un contacto contemporáneo, labor que de por si, es patriótica como quiera que se la vea.
El BFND, ahora bajo la dirección de Elizabeht Crooke, una joven artista de la que se dudó en principio, que fuera a resultar la persona adecuada por su práctica mas vinculada a los musicales que a afán investigativo y coreográfico de los orígenes iniciales de nuestro danzar, ha dado una sorpresa al mostrar empuje, iniciativas y creatividad suficientes como para llevar a nuevos niveles, los trabajos iniciados por René Carrasco, Fradique Lizardo, Nereyda Rodríguez y Josefina Miniño, para citar solo cuatro de las figuras que aportaron investigaciones y prácticas del danzar a ese proceso.
Al Ballet Nacional Dominicano nuestro agradecimiento. Espero mantenerme como merecedor de esta distinción.
