Semana

Como cada Domingo

Como cada  Domingo

Partir de cero

Declaro tiempo de reinicios.
Declaro que hay que recomenzarlo todo.
Desandar los pasos dados.

Reconocer cada error.
Admitir cada deficiencia.

Entender desde ahora mis limitaciones y las de las personas que me rodean.
Reiniciar desde la nada.

Declaro que es necesario el abandono y el descargo de los pesos muertos.
Admito que debo comenzar por ver mis errores. No los de nadie más. Solo los míos.

Y me apresto a utilizarlos para crecer en la diferencia entre lo actuado, lo correcto y lo que no lo es.
Renuncio al papel del vengador o el juez de los demás.
Admito que no soy mejor que nadie.

Exhorto mi ego a ceder importancias.
Me centro ahora en mis posibilidades de ser persona.
Es el tiempo de nuevos aires.

Es la hora de las novedades esenciales.
Hora de reemprenderlo todo.

Era adelantada de mis propios perdones aspirados.
Hay que comenzar desde cero.

Hay que tomar el camino definitivo. El que se persigue sin apego a lo que ya paso.
Iniciar ahora un camino de luces.

Es cuanto se hace preciso. Partir a hacer lo mejor de mí, desde la
nada.