Editorial

Con la misma vara

Con la misma vara

Con la misma vara que se mide al Gobierno en torno al cumplimiento de las previsiones para proteger a la población de los estragos del coronavirus hay que medir si la ciudadanía asume plenamente un comportamiento cívico acorde con su responsabilidad de coadyuvar a contener y derrotar a esa pandemia.
Si bien es cierto que la mayoría de los ciudadanos acoge con debida obediencia el decreto presidencial de toque de queda en horario de 8:00 de la noche a 6:00 de la mañana, es mucha la gente que todavía toma a juego tan delicado momento de emergencia mundial.
Con toda razón se reclama de las autoridades mayor diligencia en la toma de decisiones en los ámbitos sanitario, económico, logístico y social que hagan menos pesarosa la difícil carga que hoy acarrea la sociedad dominicana, pero también es menester reclamarles a los ciudadanos asumir una conducta responsable y prudente.
Se reconoce la obligación, deber o necesidad que tienen muchas personas de salir de sus hogares cada día a procurar la subsistencia de los suyos, pero hay que entender que se atraviesa por un periodo de excepción que obliga a los ciudadanos a disminuir intensidad en sus rutinas diarias para evitar contagio del coronavirus.
Los empleados públicos y privados deberían acceder a los cientos de cajeros automáticos de bancos y asociaciones mutualistas que han exonerado a todos sus clientes de pago de comisión por retiro de efectivo, o usar sus tarjetas de débito para adquirir alimentos, mercancías o servicios.
Se reputa como una imprudencia que miles de servidores estatales abarroten oficinas bancarias, cuando esas instituciones imploran por el uso de sus canales alternos para evitar aglomeraciones en sus plataformas físicas y mayor riesgo de contagio.
Se censura también que los injustificados congestionamientos en supermercados en inusitado e injustificado afán por cargar con todo lo que ofertan esos establecimientos, pese a que esas cadenas comerciales afirman que poseen capacidad de almacenamiento para todo el año.
Al Gobierno se le pide lo que puede y debe ofrecer, pero la ciudadanía también tiene la obligación de exhibir un comportamiento acorde con la circunstancia, de obediencia a las disposiciones y exhortaciones de las autoridades, especialmente las relacionadas con la higiene, cuarentena, toque de queda y evitar aglomeraciones.

El Nacional

La Voz de Todos