Santo Domingo.-Estados Unidos anunció el miércoles, el envío a Ucrania del sistema antiaéreo Patriot, para contrarrestar los ataques a la infraestructura energética y militar de ucraniana.
Se trata de un sistema eficiente que consta de unidades de lanzaderas de misiles capaces de destruir objetivos enemigos, cuyo alcance se estima en unos 100 kilómetros. Su costo es de tres millones de dólares.
Cuenta con sensores que detectan objetivos enemigos y una vez avistado el atacante, se dispara un misil que lo destruye en el aire, sin que llegue a provocar daños en tierra.
Pero ¿qué puede hacer este sistema en esta etapa de la guerra, donde según ex oficiales de Estados Unidos, el ejercito de Ucrania se encuentra en una situación de derrota inevitable?.
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Cada unidad del Patriot puede lanzar hasta 16 misiles en nueve segundos, lo que representa 48 millones de dólares.
Pueden ser neutralizados por el sistema de guerra electrónico de los aviones de combate, y ya el presidente de Rusia, Vladimir Putin, prometió destruirlos «tan pronto penetren a suelo ucraniano».
Las autoridades estadounidenses aclararon que se necesita entrenar a los ucranianos en el uso de dicho sistema y que será después de enero cuando podrá ser utilizado contra los rusos.
Si eso es así, ya no habrá tiempo para revertir el terreno ganado por el ejército ruso, que ha logrado destruir gran parte de la infraestructura energética y militar de Ucrania con sus feroces ataques.
Rusia tiene en agenda una ofensiva terrestre en toda Ucrania, cuyo objetivo final será ocupar Kiev, la capital, en la que podrían participar tropas bielorrusas.
Según expertos, esa segunda ofensiva terrestre sería lanzada entre enero y febrero, aunque siempre se debe tener presente el factor sorpresa en la guerra.
«Sorprender al enemigo es un buen arma en un conflicto», escribió el político chino Sun-Tzu, en su libro «El Arte de la Guerra».