En una ocasión, el entonces presidente Joaquín Balaguer, ya octogenario con glaucoma y flebitis, fue cuestionado en torno a su fortaleza física y respondió que todo se debía al jugo de jagua. Esto provocó una estampida hacia el consumo de esa fruta. Los precios se dispararon y durante meses fue tema de comentarios en reuniones de amigos y familiares, así como de reportajes en los medios.

Hasta entonces, nadie sabía que la jagua era fuente natural de hierro, rivoflavina y sustancias antibacterianas. Nuestros campesinos la usaban como tratamiento contra la enteritis crónica y la hidropesía. En la medicina moderna se aconseja esa planta en las úlceras escorbúticas y venéreas.

El fruto maduro también se utiliza para el tratamiento de la bronquitis, mientras que el verde tiene propiedades astringentes, antiinflamatorias y antianémicas. Tuvo Balaguer que decirlo para que en la ciudad confiaran en las propiedades de la jagua, que bien conocían los campesinos.

Pasó la moda de la jagua, entró al escenario el noni, pero como éste no tuvo padrino prestigioso que hablara en su defensa, sus virtudes se esfumaron como agua entre los dedos.

Ahora tocó a la moringa, una planta silvestre del Caribe, especialmente de la isla La Hispaniola de la que el líder cubano Fidel Castro, a sus 86 años, profesa un amor crepuscular, que le ha dado otra razón para vivir.

Bastó con propagarse la información de que Fidel promueve el cultivo con fines alimenticios de la moringa para que en la República Dominicana se desatara un interés desbordado por comprobar las bondades de esta planta que crece libremente.

La moringa, usada por nuestros campesinos desde la época de la colonia, posee nutrientes más altos comparado con otros alimentos, destacando que sus hojas frescas o deshidratadas poseen un nivel superior de las vitaminas A y C, calcio, potasio y proteínas, mientras que su semilla contiene todas las vitaminas del complejo B en grandes cantidades.

Este es el país de la moda, donde se procura siempre mantener en alto el complejo de Guacanagarix.