El ministerio de Agricultura ha confirmado la detección en Los Corales, Punta Cana, del insecto Ceratitis Capitata, conocido como mosca del Mediterráneo, una plaga peligrosa que ataca a más de 250 especies frutales, incluidos mango, aguacates, naranjas, pera y manzana.
Aunque las autoridades han ofrecido seguridades de que tan pronto el insecto fue detectado en la región este se activó un protocolo para su control y erradicación, es menester advertir que su eliminación tardó dos años cuando ingresó al país en 2015 y causó pérdidas por US$40.0 millones.
El ministro Limber Cruz dijo que organismos de protección fitosanitarias, incluido al Organización Regional de Sanidad Agropecuaria y al departamento de Agricultura de Estados Unidos fueron informados sobre el avistamiento de la mosca del Mediterráneo en una zona limitada de Punta Cana.
La producción de mango y aguacate se ha incrementado en los últimos años, dirigida al consumo, la agroindustria y a la exportación hacia mercados tan importantes como Estados Unidos y Europa, por lo que la noticia sobre la presencia aquí de esa plaga constituye un motivo de preocupación para los productores.
Además de activar el protocolo de erradicación de la mosca del Mediterráneo, el departamento de Sanidad Vegetal de Agricultura debería con revisar los mecanismos de control fitosanitario que se aplican en todos los puntos fronterizos, puertos y aeropuertos, porque el arribo aquí de ese insecto ha sido por descuido.
Un infierno
La atención de América Latina se dirige hoy hacia Ecuador, cuyo presidente, Daniel Noboa, ha impuesto un estado de excepción, por la fuga desde una cárcel de Guayaquil del líder de la más poderosa banda del país, el asalto de un canal de televisión por encapuchados y el surgimiento de motines en otros seis recintos.
El fugado, Adolfo Macías, alias Fito, quien cumplía condena de 34 años,lidera la banda “Los Choneros”, integrada por más de 12 mil sicarios y narcos, por lo que el mandatario ha instruido al Ejercito y a la Policía procurar su captura y el desmantelamiento de ese cártel.
A esa banda se atribuye el asesinato el 9 de agosto en Quito del candidato presidencial Fernando Villavicencio, por sicarios colombianos, apresados y luego ejecutados en una cárcel ecuatoriana. El presidente Noboa, con menos de dos meses en el gobierno, enfrenta en Ecuador un infierno de violencia y criminalidad.
