Decir que muchas calles y avenidas del Distrito Nacional están intransitables podrían ser las mismas palabras de siempre, y si lo son; aunque la realidad es que en muchos casos los problemas de baches y falta de asfalto perduran porque no son aregladas de manera correcta, y a medida que pasa el tiempo y llegan las lluvias estas avenidas vuelven a quedar como antes, o quizás peor.

Se podría afirmar que posiblemente son cuatro las razones que producen hoyos o zanjas en las vías públicas. Aunque hay que tener muy en cuenta que los aguaceros juegan un papel importante a la hora de ayudar a la proliferación y agrandamiento de los agujeros que se forman por los motivos descritos más adelante.

En primer caso están los baches que se forman por una vía estar mal construida (estudio de suelo deficiente y mala ejecución de la obra, sin importar las razones). En segundo lugar podemos tener los hoyos que se forman por exceso de peso de los vehículos que transitan por ahí o falta de mantenimiento después de un tiempo de construida.

Los problemas de un drenaje inservible podría ser la tercera razón que ocasiona la formación de huecos, ya que tuberías o alcantarillas rotas forman hundimientos. Es bueno recordar que aun en muchas vías de Santo Domingo el sistema de alcantarillado pertenece a la era de la Tiranía Trujillista o de mucho tiempo antes.

La cuarta y última circunstancia que crea dificultades en el concreto o el asfalto de calles y avenidas son la excavaciones que realizan empresas públicas (CAASD, etc.) y privadas (empresas de electricidad, de comunicaciones u otras) en procura de realizar reparaciones o para introducir tubos o cables.

Después de que estas empresas realizan los trabajos que tenían en carpeta, echan tierra a las partes rotas, y pasan meses para que el Ayuntamiento o el Ministerio de Obras Públicas resuelvan el problema. Mientras tanto muchos conductores y lugareños tendrán que lidiar con los inconvenientes de hoyos y polvo.

Transitando
En el tramo de la avenida Duarte comprendido entre la avenida Nicolás de Ovando y la 27 de Febrero se pueden observar una serie de cavidades de distintas dimensiones, principalmente en todas las intersecciones que cruzan la primera vía citada.

Ahora bien el tramo de la avenida 27 de Febrero desde la Duarte hasta la calle Hermanos Pinzón, es quizás la máxima señal de descuido de las autoridades del Ayuntamiento y Obras Publicas, no solo por ser la más importante vía de todo el entorno, sino también por estar en el mismo centro de la zona comercial de la capital.

Al llegar a la calle Hermanos Pinzón con la 27 de Febrero, se puede ver un área totalmente llena de agujeros continuos que asemejan la superficie de un gigantesco guayo de concreto y asfalto que imposibilita que los vehículos se muevan con fluidez en todo el trayecto, lo que ocasiona tapones con dimensiones significativas.

En la calle Juana Saltitopa con Eusebio Manzueta, hace ya tres meses que la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) realizó una excavación para introducir un tubo cloacal. Dejaron la calle sin asfalto y rompieron una cometida de agua, y nunca más volvieron por el lugar.

“Mire, los días que hay agua en el sector, ahí es un solo charco. Ya que desde hace tres meses que vinieron la gente de la CAASD a resolver un problema. Lo hicieron, dejando dos. Ahora tenemos una zanja y una fuga de agua”, explicó Francis Genaro, residente en el lugar.

Una vía intervenida en más de una ocasión por el Ayuntamiento, es la avenida Francisco del Rosario Sánchez, especialmente en el tramo que comprende el mercadito de los Guandules se encuentra ya con hoyos en varios sitios. Aunque también pueden verse muchos problemas agujeros y zanjas en el tramo hasta llegar al puente Juan Bosch.

El distribuidor de tráfico de los puentes Juan Bosch y Juan Pablo Duarte sin tener hoyos de gran profundidad, tienen una serie de irregularidades y deformidades en el pavimento que crean dificultades para todas las máquinas que deban pasar por estas vías que conectan a los puentes con todas las demás calles del lugar.

V Centenario
Esta es una de las más importantes vías de la capital a pesar de su corta extensión. Aunque su capa asfáltica parece estar en buen estado en su totalidad, varias hoyos de alcantarillas sin tapas crean un ambiente de inseguridad.

Además existe un problema de alcantarilla y aguas negras estancadas que producen un mal olor que nunca ha sido resuelto, creando un ambiente contaminante.

Otro inconveniente que se torna molesto para los conductores y residentes es el de algunas de las juntas de metal que sirven de unión en los cuatro elevados de la vía, ya que casi todo el año se la pasan deterioradas creando zanjas que dificultan pasar por el lugar.

Estas zanjas producen un inquietante ruido (crack, caann) al chocar los metales entre sí con el impacto de los neumáticos de los vehículos que invaden todas las viviendas del sector, y persiste durante todo el día y con especial propagación durante la noche.

Gascue
Por más de una década las calles del exclusivo sector de Gascue a pesar de ser uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Santo Domingo y por estar ahí el Palacio Nacional, aunque no están intransitable si deberían estar en mejor estado, ya que en una que otras vías pueden encontrarse pequeños e incómodos hoyos que crean contratiempos.

Don Bosco
Desde hace cuatro meses algunas de las calles del sector Don Bosco han sido intervenidas por la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de la Ciudad de Santo Domingo (CAASD) con el propósito de la sustitución de todas las tuberías de agua potable e instalación de nuevos medidores y acometidas.

Mientras esto ocurre las calles Rosa Duarte, Francia, Rocco Cochía, Cachimán, Galván, entre otras permanecen rotas, hasta tanto no sean completados todos los trabajos de excavación e introducción de tubería y se hagan las pruebas necesarias, originado grandes taponamientos y una densa polvareda que dificulta la vida en el sector.

Los trabajos que deberían ya haber terminado en tres semanas siguen en pleno desarrollo y hasta ahora no se sabe cuando terminaran con exactitud.

“La CAASD dejó de trabajar en julio y reiniciaron los trabajos dos meses después y al ver esto la Junta de Vecinos solicitó a las autoridades de la CAASD y Obras Públicas resolver la situación”, expresó Ernesto Ruiz, vocero de la Junta de Vecino de Don Bosco

Según Ruiz, la institución se comprometió a seguir con los trabajos y terminar en tres semanas lo cual no se ha hecho, por lo que el problema del polvo y el tránsito continúan como el primer día.

“Nosotros pensábamos que una vez se asfaltarían las calles este sector que tienen 15 años sin ser asfaltadas, sin embargo la CAASD solo asfaltará las zanjas que ellos hicieron”, explico el comunitario.

Oscuridad
A pesar del plan de iluminación llevado a cabo por el Ayuntamiento del Distrito Nacional denominado “Santo Domingo Iluminado”, con la reparación de lámparas y sustitución de bombillas en los postes del alumbrado público de algunos de los barrios de la Capital, son muchos los sectores que de noche permanecen a oscuras.

Un ejemplo palpable es que hay muchas calles y esquinas del exclusivo sector de Gascue que se encuentran sumidos en las tinieblas originando una atmósfera de inseguridad durante toda la noche.