Opinión

Ecologicas

Ecologicas

Nuestro país posee múltiples acuerdos internacionales sobre comercio, entre ellos el TLC con Centroamérica y Estados Unidos, en esos acuerdos y tratados nosotros siempre vamos con materia prima, mientras los demás países van con el producto terminado, nada de beneficio para nosotros y en los casos en que lo tenemos es tan bajo que apenas se percibe. Nuestro Ministerio de  Relaciones Exteriores y de Comercio debe enfocarse a trabajar seriamente en el capital natural de nuestra nación, este capital casi nunca mencionado en ningún tratado o acuerdo es el patrimonio que nos salvará o nos hundirá acorde con las conciencias de quienes nos ha dirigido en los últimos 25 años. ”Hace 20 años la primera Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro se enfocó en la importancia del medioambiente y de los servicios que proporciona (colectivamente indicados como “Capital Natural” de la Tierra) para preservar la existencia humana. A medida que nos acercamos al vigésimo aniversario de este gran acontecimiento, la comunidad internacional dirige su mirada a la inminente Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sustentable 2012 (llamada Río+20) para avanzar en temas claves como la economía verde y un marco institucional para el desarrollo sustentable”. El Capital Natural incluye los bienes naturales de la Tierra (suelo, aire, agua, flora y fauna) y los servicios de los ecosistemas derivados, que hacen posible la vida humana. Los

bienes y servicios provenientes del Capital Natural tienen un valor de miles de millones de USD cada año y proporcionan alimentos, fibras, agua, salud, energía, seguridad

climática y otros servicios esenciales para todos. Ninguno de estos servicios, ni el stock de Capital Natural que los produce, son adecuadamente valuados en comparación con el capital social y financiero. Aunque sean fundamentales para nuestro bienestar, su uso diario pasa casi inadvertido en nuestro sistema económico. Utilizar el Capital Natural de esta manera no es sustentable. El sector privado, gobiernos, y todos nosotros, debemos día con día comprender y darnos cuenta del uso del Capital Natural, reconociendo el verdadero costo del crecimiento económico y del bienestar humano de hoy y mañana. Enfocar la dirección hacia el mejoramiento de la vida social de los habitantes de una nación debe ser el primer norte a seguir por todo Estado que se respete mínimamente. Si vamos al caso Barrick encontramos serias fallas en el primer contrato y esto es una verdadera negación de nuestro patrimonio natural en beneficio de compañías multinacionales y sus socios nacionales. De la misma manera estamos de frente a varios contratos que involucran nuestro patrimonio natural,  aunque se les está revisando actualmente, ponen en serio peligro la dignidad nacional en cuanto a  protección de

nuestros recursos naturales y nuestra biodiversidad nacional.

El Nacional

La Voz de Todos