La Fundación Manos Fraternas anunció que continúa con su labor solidaria a favor de personas con discapacidad que viven en extrema pobreza, con el propósito de mejorar sus condiciones de vida.
Inti Vásquez de Rivas, presidenta de la Fundación Manos Fraternas, expresó que este proyecto inició en el sector Savica, en Los Alcarrizos, con la reconstrucción de la casa de Carmela Sánchez Pérez, madre de Sheydelin, una niña con discapacidad.
Se informó que la vivienda fue remozada en casi un 90 por ciento, convirtiéndola en un lugar seguro, con las condiciones necesarias para vivir de manera digna y sobretodo, ofreciéndole a la pequeña Sheydelin un espacio donde pueda desenvolverse con más facilidad.
Expresó que uno de los graves problemas de estos segmentos vulnerables de la sociedad es la falta de una vivienda que les permita subsistir con dignidad, y es por ello, que esta institución ha puesto en marcha el proyecto “Construyendo un Hogar Fraterno”.
La licenciada Vásquez de Rivas insistió en que los casos de personas con discapacidad de la tercera edad son de atención prioritaria para la Fundación Manos Fraternas, debido a la carencia de programas eficientes en donde se les proporcione a estos, las condiciones de vivir de manera digna.
