Un capricho federado

En el ficticio pueblo de Macondo, el coronel Nicolás Ricardo Márquez Mejía, el personaje que inspiro a Gabriel García Márquez a escribir *El Coronel no tiene quien le escriba * en realidad, no tenía quien le escribiera, pero, en nuestra querida, real y sufrida República Dominicana, el fútbol tiene dolientes que leen, escuchan, hablan y escriben.

Hacemos esta inusual introducción para referirnos al caprichoso nombramiento del entrenador de nuestra selección Olímpica que anuncio la Federación Dominicana de Fútbol.

Al margen de quien es el técnico favorecido con la designación, a 150 días del inicio del Torneo Olímpico y a menos de un mes de las elecciones de Fedofútbol, nombrar a un entrenador sin experiencia internacional que no conoce nuestro fútbol, nuestros jugadores ni tampoco nuestra idiosincrasia, es una mayúscula desconsideración para el fútbol criollo.

La comunidad futbolística nacional y el país sabe que Fedofútbol tiene bajo contrato al técnico argentino Marcelo Neveleff quien dirige con acierto a la selección absoluta. Pues bien, Marcelo es un entrenador capacitado y apasionado del fútbol, muy apreciado por los jugadores nativos y tiene un enorme deseo de aportar sus conocimientos y vasta experiencia en favor del fútbol nacional.

Neveleff conoce nuestro fútbol -vive en el país- ha dirigido a la mayoría de los jugadores susceptibles de formar parte de la selección olímpica, dispone de tiempo, es miembro -inconsulto- de la comisión de selecciones nacionales y, al estar contratado no representa un costo adicional para Fedofútbol pero, desafortunadamente para nuestro fútbol, sus múltiples y sanas iniciativas han sido constantemente bloqueadas.

No comprendemos la caprichosa decisión de los federados al nombrar a un entrenador sin antecedentes competitivos y que solo ha dirigido a juveniles en el país vasco además de ello, su nombramiento se produce en vísperas del periodo preelectoral de Fedofútbol y el futuro inmediato de sus ejecutivos, es por demás incierto.

Antes, en el fútbol nacional, la tolerancia era tan grande como la desinformación, pero ahora, el coronel (fútbol) tiene dolientes que leen, escuchan, piensan y escriben.

Y nosotros -uno de ellos- les invitamos a ser coherentes. Por una parte, realizan infinidad de cursos de capacitación técnica en el país, pero por la otra, en vez de reconocer el estudio, trabajo, dedicación y el conocimiento de nuestros entrenadores, contratan a un inexperto técnico que pretende traer a cinco colaboradores, es decir que para Fedofútbol, en el país no hay ningún entrenador ni PF calificado.