“Fueron ustedes lo que lograron esto. Este debió ser un record de tomper 105 horas cantando, pero no fue así. Esto fue un record de romper corazones, de hacer que mucha gente llorara, de que todo un país se uniera por un sentimiento, y eso no se logra con un records Guiness”, así lo expresó Carlos Silver, quien intentará la hazaña de ser la persona con más horas cantadas en el mundo.
Silver, quien según el jurado Carlos Tapia Rojas, adjudicador y supervisor del libro Guinness World Records, que supervisó el evento, tuvo algunas fallas, dijo que a diario se hacen records mundiales, pero que lo de este país se logró porque había una magía del Espíritu Santo manejando el evento.
Durante una entrevista en el espacio “El Despertador” , que se transmite en Color Visión, canal 9, habló de la forma en que se enteró de este reto.
Agregó que desde el inició estuvo involucrada la mano de Dios.
“Caí en una fuerte depresión cuando me despidieron de la empresa para la cual laboraba y en la noche me arrodillé y le pedí a Dios que dejará ganarme la vida con mi voz y, en sueño, una profesora me dijo que a quien yo le hice la petición me dijo que por qué no canto para Guinnes”, relató Silver.
El cantante aún se encuentra conectado a un tanque de oxígeno y está disfónico. Dijo que chequeó todas las reglas y le escribió a Guines en varias ocasiones hasta que su carta fue respondida.
De una forma optimista, señaló que está celebrando que no lo certificaran porque “si esto hubiese sido un éxito y lo certifican y queda ahí, esto hubiese sido un fracaso, pero y esa certificación de amor que me regaló este país ¡Quien puede pedir más de ahí? Esto es un papel. Yo hago 10 records más y se los voy a ganar”, dijo Silver.
Informó que ya tiene fecha para realizar el otro intento de romper el record. “No voy a hablar de eso ahora. Eso sí, ese certificado van a tener que dárselo a este país”, afirmó.
UN APUNTE
Récord
Carlos Silver inició su record el pasado viernes en el parque Eugenio María de Hostos, y permaneció 106 horas cantando. Está es la segunda ocasión que buscaba lograr la hazaña de romper el record de más horas cantadas en el mundo.