Luis Acosta Moreta
La depredación del guaconejo, un árbol común en este país y Haití que se utiliza como materia prima para elaborar fragancias, ha vuelto a disparar las alarmas.
En la vecina nación no queda prácticamente una mata en pie, pero con todo y eso el país exporta a Europa la esencia que se extrae de su corteza.
Lo que ocurre es, según dijo que comprobó el dirigente político y activista social Luis Acosta Moreta, que aquí se talan los árboles, se procesan y la materia prima se comercializa en Haití en forma clandestina.
La depredación, de acuerdo con Acosta, no es obra de haitianos aislados, sino de una poderosa estructura que opera de este lado de la frontera.
La denuncia es para que se abra una exhaustiva investigación pues es obvio que la operación se realizaría con complicidades al más alto nivel. Medio Ambiente y Defensa ya están, si es que no lo estaban, al tanto del caso.
El Nacional
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