José Rafael Sosa
joserafaelsosa.com
Espacios y resonancias
A reservas de volver a escribir, con el espacio que sin duda merece, sobre el acontecimiento bibliográfico del momento, la presentación de los tres primeros tomos de la compilación de la obra de crítica y crónica literaria de José Rafael Lantigua, publicada en el suplemento cultural Biblioteca, que inició en El Nuevo Diario, a donde le dio cabida Juan Bolívar Díaz, para pasar en 1993 a Ultima Hora y finalmente, ya en el año 2000, al Listín Diario.
Los tres tomos se han convertido rápidamente en pan caliente de librería. Todo el mundo literario lo busca. Todo el mundo literario, se busca.
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Lantigua cumplió durante 20 años con la encomienda de producir el mejor de los suplementos que sobre el libro se ha realizado en República Dominicana, seguido por Isla Abierta (que editaba Manuel Rueda para el diario Hoy) y el Suplemento Aquí, (responsabilidad de un equipo al frente del cual se destacaron Mateo Morrison y León David, entre otros) en los tiempos.
Biblioteca supo crear una trayectoria que unió en un espacio común a escritores y lectores; que ofreció a los primeros su primera oportunidad de sentirse objeto de atención especializada; que ofreció a los lectores la oportunidad de reflexionar sobre la producción literaria nacional e internacional y que promovió a las grandes obras, tanto clásicas como contemporáneas, de la literatura universal y particularmente de la Iberoamericana y autores de lengua inglesa.
Sin darse cuenta, Lantigua creó un circulo de amantes de la literatura en todos sus géneros, que fue creciendo y fortaleciendo su nexo con la creación,
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Tuvo la oportunidad de enjuiciar y aconsejar. No era complaciente, pero tampoco un verdugo.
Como crítico se cuidada de no ser padre ni obsesivo ni inclemente.
Era una voz de aliento, de revisión, de recomendaciones que llamaban a reivindicar el rigor de la creación.
Los tres primeros tomos, editados con la mano milagrosa de Ninón de Saleme y la impresión impecable de Amigo del Hogar, con el cuidado, preciso y clarísimo del propio autor, sus primeros trabajos publicados desde 1985 hasta 1994.
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Ni el propio José Rafael Lantigua, no el que luego sería Ministro de Cultura con un estilo que marcó esa cartera, con toda la cohorte de amigos y enemigos generados por una función ministerial tan sensible, tiene idea clara de lo que representó la edición de esos suplementos.
Una labor de 20 años que el mismo supo ponerle fin cuando entendió que llegaba el momento. !Bienvanturanzas por la aventura de Biblioteca!