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Lina: la cocinera de Trujillo

Lina: la cocinera de Trujillo

Juan B. Nina

El cocido o sancocho más antiguo de la isla de santo Domingo, data de 1650. Levy Bruhl.
El gusto excéntrico del dictador lo llevó a tomar decisiones, tal vez nunca vistas en el país, con el fin de satisfacer su paladar.

En una visita que giró al dictador español Francisco Franco, probó un cocido y fue tal su fascinación que se trajo al país a Lina, la cocinera que lo preparó. Disfrutaba de grandes banquetes y de la comida de calidad, pero lo que le fascinaba era el sancocho de gallina, el arroz con pollo y el requesón.

Según Angelita Trujillo, su hija, este cenaba temprano de 5:30 a 6:00 de la tarde y después se iba a caminar dos horas, por la George Washington.

Lina fue una chef española traída al país para la cocina privada del entonces presidente Rafael Leónidas Trujillo. Cuentan los más allegados que doña María Martínez, esposa de Trujillo, desconocía la existencia de Lina en su casa y al enterarse inmediatamente la despidió.

Agradecido con ella Trujillo le regaló 25 mil pesos que para esa época significaba una fortuna; fue así como doña Lina en 1954 instaló una churrasquería y cafetería en la avenida Independencia No. 54 y que más tarde se convirtió en un restaurante de comida española, El Cantábrico, siendo uno de los 50 mejores restaurantes del mundo.

Luego Marcelina Aguado de La Rosa-Doña Lina se trasladó a la avenida Máximo Gómez donde abrió otro restaurante que con el tiempo fue creciendo y en el 1973 pasó a ser un pequeño hotel de 66 habitaciones, que con el apoyo de las clientelas a finales de 1984 se amplió para convertirse en el Gran Hotel Lina, hasta julio de 1989 cuando pasa a la cadena de hoteles Barceló.

Por: Juan B. Nina

ninajuanb@gmail.com

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