Definitivamente, los acuerdos incumplidos y el rechazo están incidiendo notablemente para que algunos dirigentes sociales y organizaciones políticas de la oposición se encuentren en una fuerte honda de aislamiento con respecto a la Convergencia planteada por el ex-presidente Hipólito Mejía y el licenciado Luis Abínader.
Tal como he venido planteando desde hace varios meses, un gran número de instituciones de la sociedad civil y del espectro partidista han visto con detenimiento el avance registrado por el ex-primer mandatario de la nación para convertirse en el candidato a la Presidencia por el Partido Revolucionario Moderno.
Esos sectores estiman que tal cosa podría echar un balde de agua fría a la idea de formar un Frente Unico contra el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Para los entendidos en los menesteres políticos, no es sorpresa el gran arraigo que mantiene Mejía alrededor del PRM.
Lo que sí ha sido algo incomprensible es que éste se ponga de espaldas a la historia y no utilice su gran liderazgo para propiciar un desplazamiento del PLD en las próximas elecciones nacionales.
Todavía el pasado lunes, el viejo militante izquierdista Felito Cabrera, legendario dirigente del Frente Estudiantil Flavio Suero (FEFLAS) en la Zona Norte de la capital, me decía que el ingeniero Mejía debería comprender cabalmente que el mejor servicio que le hace a la República Dominicana es usando sus cualidades de líder para unificar.
He sabido que el licenciado Hatuey De Camps, por ejemplo, no está en disposición de apoyar la candidatura del Guapo de Gurabo debido a que éste no habría cumplido con algunos acuerdos a que arribaron para las votaciones del 2012.
De igual modo, Ismael Reyes, un dirigente muy allegado al presidente del Partido Revolucionario Social Demócrata, también descartó las posibilidades de pactar con la Convergencia.
Asimismo, tengo entendido que importantes dirigentes del PRM han manifestado su disposición de llevar a Abinader por encima de Mejía.
Hay quienes afirman que ya Hipólito no cuenta con las fuerzas que lo impulsaron a obtener el 47 por ciento de los votos emitidos en los comicios pasados.
Esos círculos entienden que -en las presentes circunstancias- el ex-presidente Leonel Ferdández lo derrotaría en la primera o segunda vuelta.