Sin ánimos de sentirse conforme y consciente de lo que ha alcanzado, el luchador Luis Miguel Pérez Sosa asegura que tan solo el hecho de haber clasificado a los Juegos Olímpicos de París es ganancia.

“Ya me siento como un ganador, sin haber competido, tan solo el hecho de representar mi país, me hace sentir triunfador”, expresó Pérez sobre su participación en París 2024.

El boleto obtenido en lucha olímpica estilo libre en los menos 97 kilos, tiene un sabor especial, ya que luego de 20 años un luchador dominicano estará en la principal cita olímpica, luego de que Jansel Ramírez, en lucha grecorromana, lo hiciera por última vez en Atenas 2004.

Lucha y béisbol

La historia de Pérez Sosa dentro de la lucha está marcada desde que inició a practicarla a los 7 años, pero como todo niño dominicano también jugaba al béisbol, desempeñándose como lanzador zurdo.

Francisco de Frank, quien fue el entrenador de iniciación en lucha de Pérez Sosa, relata que la inclinación por completo a la lucha del atleta llegó a los 15 años cuando le robaron el guante y por su condición de ser izquierdo se le imposibilitó continuar en la pelota, ya que no contaba con los recursos para comprar otro.

“Lo es todo”

Desde ese entonces Luis Miguel no ha hecho otra cosa que no sea combatir, incluso por esta vía llegó a ser reclutado para formar parte de la Policía Nacional.

“La lucha para mí lo es todo. Es la que me ha ayudado a estar donde estoy hoy día”, manifestó el medallista de plata en los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2023.

Rusia

Pérez Sosa viene de agotar una base de entrenamientos en Rusia, donde permaneció un mes y medio, y este lunes parte a Francia para entrar al campamento de Panam Sports para seguir preparándose de cara a su compromiso en París 2024.

La clasificación a los Juegos Olímpicos ha sido muy especial y emotiva para Pérez Sosa, quien luego de intentarlo en varías ocasiones finalmente lo logró.

Señala que la intensidad y horas de entrenamientos han aumentado a raíz de la clasificación olímpica y que estos le han ayudado a corregir algunos aspectos técnicos que le ayudarán a tener mejor desempeño.

“Sé que tengo un gran compromiso con la República Dominicana”.

Destaca cómo se ha esforzado para hacer realidad uno de sus sueños como atleta y de cómo ha tenido que sacrificar el tiempo al lado de su familia para trascender.

Tras su clasificación ha vivido el hecho de pasar del anonimato a ser un atleta reconocido, donde la gente en la calle lo identifica y le pide tomarse fotos.

“Eso me hace sentir más comprometido, porque veo que la gente estará pendiente a lo que haré y debo de dar lo mejor de mí en esa competencia”.

Coraje e inspiración

Indica que desde que inició en el deporte siempre ha soñado con estar en lo más alto, por lo que en esta etapa su mayor motivación para alcanzar cada meta son sus dos hijos.