Luis Rojas, dirigente de los Mets de Nueva York.
Ken Davidoff
New York Post
Imagine a Luis Rojas tratando de explicar su estatus profesional a alguien que acaba de salir de una expedición de seis meses en el mar, cortado de toda comunicación a la “El último barco”:
“Bueno, conseguí mi trabajo cuando mi compañía despidió a un tipo que había contratado 2¹ / 2 meses antes, antes de que ese tipo hiciera una reunión de equipo. Luego realicé el trabajo durante menos de dos meses antes de que una pandemia cerrara la mayor parte del mundo, tiempo durante el cual nuestro país experimentó disturbios sociales masivos además de la muerte, la enfermedad y el desempleo resultantes de la pandemia. Ahora finalmente tengo la oportunidad de reanudar mi trabajo, con el entendimiento de que mi industria podría cerrar en cualquier momento”.
¡Uf! Escuchar eso probablemente te motivaría a cortar la comunicación nuevamente, ¿verdad?
En este intento ultra extraño en una temporada de béisbol de 2020, Rojas, de 38 años, recibe su oportunidad bajo las circunstancias más extrañas de cualquiera que haya aterrizado su posición. Para que los Mets ganen ahora a medida que se construyen, con el campamento abierto el viernes en Citi Field, su patrón novato debe ignorar el pesado drama que lo dejó en este lugar y enfrentar los dramáticos obstáculos que es más probable que no. descansar en su futuro a corto plazo.
Afortunadamente para los Mets, el hombre empujado en el asiento del pájaro gato, el Gerald Ford de los gerentes, como lo describió Mike Vaccaro de The Post, parece tan tranquilo y discreto como un miembro del escuadrón de bombas.
“Definitivamente es un desafío y una experiencia de aprendizaje”, dijo Rojas de aspecto relajado el jueves en una llamada de Zoom con los medios. “He aprendido mucho a lo largo de esto, y todavía aprendo hoy, tantos temas diferentes. Todo lo que puedo decir es que estoy agradecido en este momento de que nos estamos preparando para volver”.
El primer campamento de Rojas en realidad procedió bastante bien, los Mets mostraron su considerable suministro de talento mientras se mantuvieron relativamente libres de lesiones y construyeron buena voluntad a raíz de la decisión correcta de deshacerse del contratista directivo de noviembre Carlos Beltrán, a quien la Liga Mayor de Béisbol tocó como líder. el escándalo de robo de señales ilegales de los Astros de 2017 y lo reemplazan con Rojas.
Luego, los juegos se detuvieron el 12 de marzo debido al coronavirus, e incluso antes de llegar a abril, el lanzador titular número 2, Noah Syndergaard, cayó por el año con la cirugía Tommy John. El campamento comienza con todos los demás presumiblemente sanos, Michael Conforto ha curado la tensión oblicua derecha.
Deberá adaptarse
Luis Rojas, como líder de los Mets enel campo, debe adaptarse sobre la marcha a estos incendios sin precedentes, al mismo tiempo que intenta extinguir los incendios estándar (administración del juego, masajear los egos de los jugadores y pasar tiempo con los medios, entre otros) por primera vez.
