El Colegio Médico Dominicano (CMD) y las sociedades especializadas prefieren privar de asistencia a los pacientes antes que dialogar para buscar soluciones a los problemas que han denunciado en el sector salud.

Más que contradictorio se trata de un abuso que los médicos convoquen a una huelga de 48 horas en reclamo de que las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) satisfagan sus demandas.

En su conflicto con las ARS es repudiable que el gremio y las sociedades especializadas castiguen a los pacientes con la suspensión de los servicios de salud.

El presidente del gremio, Senén Caba, cae en el cinismo al decir que la huelga procura beneficiar a los afiliados de la seguridad social. Los asegurados no quieren que los protejan y defiendan tomándolos como escudos de una lucha de intereses protagonizada por los galenos.

Caba señaló que los afiliados de la seguridad social deben ser incorporados al Plan de Servicios de Salud, atenciones y fármacos por especialistas que generasen cambios ostensibles en el catálogo de los diferentes regímenes y al mismo tiempo mejorar los honorarios de los prestadores.

Tan frecuentes se han tornado las huelgas médicas que parecen responder más a intereses particulares que propiamente gremiales.

Pero a pesar de la tozudez del CMD y las sociedades especializadas hay que insistir en el diálogo como la vía más idónea para afrontar las necesidades del sector salud.