Cifras críticas
A pesar de los pronósticos lúgubres que sobre la marcha de la economía nacional suelen hacer economistas y políticos criollos, tanto las estadísticas suministradas por el Banco Central como las avaladas por organismos especializados del sistema de las Naciones Unidas al estilo del Fondo Monetario Internacional (FMI), Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Banco Mundial (BM) evidencian que las actividades productivas, comerciales y financieras avanzan favorablemente…

Esa buena imagen acerca del desempeño económico nacional tiene mucho que ver con la continuidad institucional lograda dentro del Estado dominicano debido a las victorias electores del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y las acciones gubernamentales ejecutadas por los presidentes Leonel Fernández (1996-2000, 2004-2012) y Danilo Medina (2012-2016 y su actual período constitucional 2016-2020), las cuales han transformado para bien la base infraestructural del país y los criterios para enfrentar el lastre social de la pobreza y la exclusión social.

Durante el primer período de gobierno de Leonel Fernández (1996-2000) la economía creció a un ritmo promedio de 6.8 por ciento, superándose la tasa media de crecimiento en la región latinoamericana y caribeña que fue de 4.2 por ciento. La cotización del dólar apenas se movió 3 pesos con 32 centavos, en tanto que la inflación se desplazó de 5,40 por ciento (1996) a 7,72 por ciento (2000), siempre por debajo de los dos dígitos. La estabilidad en los precios y en el valor de la moneda nacional fue notoria.
En efecto, ¿cómo olvidar que durante la era del PRD/Hipólito Mejía (2000-2004) el crecimiento económico fue negativo (-1,3 por ciento); que la inflación se disparó a una tasa de 56,4 por ciento; que para usted comprar un dólar tenía que pagar unos 55 pesos; que la tasa de desempleo creció a 19,7 por ciento; que la pobreza aumentó en un 44 por ciento y que la crisis bancaria devoró el 20 por ciento de la riqueza material creada en tan sólo cuatro años? Para ese entonces cundió la desesperación social y la incertidumbre bancaria…

Pero llegaron los dos períodos de gobierno de Leonel Fernández (2004-2012). Entonces la tasa de cambio se movió a la baja desde 41 pesos con 25 centavos (2004) hasta 34 pesos con 79 centavos (2008) para situarse en agosto de 2012 a los 39,28 dólares registrando estabilidad con crecimiento económico (promedio superior al 7 por ciento) y tasas de inflación que descendieron de ¡51,46 por ciento (2004)! hasta apenas 3,9 por ciento (2012).

¿Y qué decir de los gobiernos del PLD que ha presidido Danilo Medina? El crecimiento económico y la estabilidad macroeconómica han estado presente, pues durante el período 2012-2016 la economía siguió creciendo a una tasa cercana al 6 por ciento, en tanto que el índice de precios al consumidor 1,61 por ciento, la más baja en los últimos 33 años de la economía nacional.

Las cifras ofrecidas precedentemente explican el por qué la República Dominicana es vista como una estrella refulgente dentro del opaco panorama económico regional, proyectándose para los próximos años mejores niveles de redistribución de la riqueza y del mejoramiento de la calidad de vida de la población dominicana.